La Bahía de Banderas, conocida por su potencial turístico, enfrenta una crisis ambiental que preocupa a activistas y residentes por igual. El desarrollo descontrolado de la región ha generado una serie de problemas que van desde la escasez de agua potable hasta la contaminación ambiental, advirtió la activista María Liba Gutiérrez, portavoz de la asociación “Red Más”.

Según Gutiérrez, en entrevista concedida a El Occidental, la falta de preocupación y medidas efectivas por parte del ayuntamiento para proteger el medio ambiente ha exacerbado la situación. La ausencia de programas de reciclaje de basura y un inadecuado manejo de residuos han contribuido a la acumulación de toneladas de desechos, especialmente durante las vacaciones de Semana Santa, cuando la afluencia turística aumenta significativamente.

Entérate: Bahía de Banderas, sin programa de separación de basura

Un problema crítico es el tratamiento inadecuado de las aguas residuales en localidades como Sayulita, un destino turístico popular que ha atraído la visita de miles de personas. La planta existente resulta ser insuficiente para hacer frente al crecimiento demográfico y al turismo, explicó la ambientalista, lo que ha llevado a la contaminación de cuerpos de agua locales y a la degradación del ecosistema marino.

Desabasto de agua potable en Bahía de Banderas, otra realidad alarmante

La situación se agrava con la escasez de agua potable en diversas comunidades, como San José del Valle, San Vicente, San Juan y Valle Dorado, donde los residentes han experimentado interrupciones en el suministro desde el inicio del año. Este problema, atribuido al crecimiento desmedido de la región en los últimos años, ha evidenciado la falta de una planificación adecuada por parte de las autoridades locales.

Entérate: Exceso de construcciones implica riesgo de escasez de agua

Gutiérrez lamenta la concesión indiscriminada de permisos de construcción para proyectos inmobiliarios, incluidos hoteles y condominios, sin considerar las repercusiones ambientales a largo plazo. La construcción de un edificio de 14 pisos con estacionamiento subterráneo, que fue detenida gracias a la resistencia de la sociedad civil, sirve como ejemplo de la lucha contra la destrucción del entorno natural.

Ante esta situación, María Liba Gutiérrez hace un llamado urgente a las autoridades municipales y estatales para que tomen medidas efectivas que protejan el medio ambiente y garanticen un desarrollo sostenible en la Bahía de Banderas. Asimismo, insta a la ciudadanía a involucrarse activamente en la preservación de su entorno y a exigir transparencia y responsabilidad en la toma de decisiones que afecten al medio ambiente y a la calidad de vida de las comunidades locales.