“Sumisos contra rebeldes”

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El General en retiro Mauricio Ávila Medina se ha manifestado con toda valentía, poniendo de manifiesto el descontento existente en los altos niveles militares, que, por disciplina tradicional en el ejército mexicano, no pueden contradecir órdenes de su superior, en este caso, el presidente en turno.

Hoy lo juzgan con un Jurado Militar por sus declaraciones.

Quizá el General Ávila es un vocero visible y valiente, y sus conceptos son compartidos por muchos militares de alto rango.

El Gral. Ávila está defendiendo el honor de todos los militares atendiendo a los enunciados de la Constitución en donde claramente se definen las responsabilidades y obligaciones del Instituto Armado y no las obligaciones dadas por el presidente en turno, como si fueran su apoyo obligatorio y único a sus necedades.

Las responsabilidades iniciales dadas al ejército, empezando por la persecución de cárteles ligados con delincuencia organizada, drogas, asesinatos, extorsión y secuestros,

pero con la salvedad de no poder usar sus armas, lo que es humillante.

Ha habido casos vergonzosos en donde han secuestrado militares, golpeándolos y robándoles las armas, sin poder disparar un balazo.

Estas han sido afrentas a grupos de soldados, pero una ofensa enorme al Ejército Mexicano, por la orden de no usar las armas.

Sin ser militar, pero imaginándome ser egresado del Colegio Militar, con toda la disciplina, honor a la patria y guardián de la seguridad de México. Expertos en combate de guerrillas, inteligencia militar, egresando con honores y ser enviado a Guerrero a perseguir delincuentes sin poder usar sus armas ni su entrenamiento ofensivo, debe ser una frustración y descontento silencioso generalizado.

Este mismo descontento debe existir en las élites militares de los generales de división activos, bajo las órdenes del secretario de la defensa, elegido por el presidente en turno, quien, por cierto, no estaba en la terna tradicionalmente presentada por las fuerzas armadas, como su propuesta para secretario de la defensa.

Será interesante ver qué pasa con el Gral. Mauricio Aviña, con sus colegas de armas, quizá pensando igual, pero sin la valentía del acusado, por las futuras consecuencias de ese juicio.

Será un juicio de, “sumisos contra rebeldes”.