¿Por qué está haciendo TANTO calor si todavía es invierno?
Aunque podría parecer completamente lo contrario dado las intensas temperaturas que se están registrando en la mayoría de México, la temporada de invierno aún no termina en el país, y de hecho, aún faltan algunos días para que esto ocurra de manera oficia.
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Esto ha generado muchas dudas entre la población por saber la razón que está generando que se registren olas de calor tan temprano en el calendario, y a continuación te lo explicamos.
¿Por qué hace calor en México, si todavía es invierno?
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha señalado durante una semana, o más, que en México hay un fenómeno meteorológico que está provocando las intensas temperaturas en gran parte del país.
Se trata de una circulación anticiclónica que se encuentra en niveles medios de la atmósfera, y tan solo este lunes 11 de marzo, provocará temperaturas máximas superiores de 40°C en los siguientes estados:
- Temperaturas máximas de 40 a 45 °C: Michoacán, Guerrero y Morelos (sur).
- Temperaturas máximas de 35 a 40 °C: Nayarit, Jalisco, Colima y Chiapas (costa).
¿Qué es una circulación anticlónica?
Una circulación anticiclónica, también conocida como anticiclón, es un sistema meteorológico caracterizado por un área de alta presión atmosférica en su centro.
En un anticiclón, el aire tiende a descender desde la atmósfera superior hacia la superficie terrestre, creando condiciones de estabilidad atmosférica.
Las características principales de una circulación anticiclónica son:
- Alta presión atmosférica: Esto se debe al aire descendente y a la compresión que experimenta al llegar a la superficie terrestre.
- Cielos despejados y condiciones estables: Esto significa que hay poca probabilidad de precipitación y que las condiciones atmosféricas suelen ser tranquilas.
- Vientos divergentes: En la periferia de un anticiclón, los vientos tienden a divergir en sentido horario en el hemisferio norte y en sentido antihorario en el hemisferio sur.
Los anticiclones pueden persistir durante varios días o incluso semanas, dependiendo de la fuerza de las corrientes en chorro y otros sistemas meteorológicos que puedan influir en su desarrollo y movimiento.
