“Nos emboscaron en Querétaro”, asegura aficionado del Atlas

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Impotencia, coraje y desconcertados, son algunos de los sentimientos que los aficionados del Atlas vivieron en el pasado encuentro de su equipo vs los Gallos Blancos.

Eduardo Muro “Jocker”, es un fiel seguidor de los Zorros. Desde muy temprana edad, asegura que su padre fue quien le heredó este amor por su equipo de fútbol, al que incluso ha seguido por casi todo el país, y confirma que nunca antes había vivido lo que el pasado sábado en Querétaro, el acontecimiento que cambió la historia de este deporte en México.

Asegura que la misma autoridad queretana fue quien le permitió el acceso a la porra del equipo local para ingresar al área en la que se encontraba la del Atlas. Menciona que las puertas eran muy gruesas como para que la misma fuerza de las personas las abrieran, y que sin duda la policía presente se las abrió. 

Eduardo Muro, seguidor del Atlas

Además confirma que quienes comenzaron a enloquecer primero fueron los locales, y todo ocurrió muy rápido e inesperadamente.

Afirma que él mantuvo la calma, no corrió en ningún momento, y apoyó como pudo principalmente a mujeres y niños, quienes iban a resguardarse a los vestidores del equipo local, esto porque el mismo entrenador, Hernán Cristante lo permitió.

Extintores, picahielos, hieleras, piedras, butacas, había de todo.

“El campo de juego era un zoológico”, afirma. 

Referente a si sufrió lesiones únicamente se lastimó sus rodillas por unas patadas que le hicieron pero no pasó a mayores.

Comenta que faltó un integrante en su camión, pues quedó internado en un hospital en Querétaro. 

Al momento de llegar a Guadalajara, dijo sentirse afortunado y agradecido. La imagen que quedará grabada en su memoria será la de los niños corriendo, confundidos y muy asustados; además la de las mamás que llegaron a recibirlos con la esperanza de ver a sus hijos bajarse de algún autobús con aficionados de los Zorros del Atlas.

En el tema de los filtros de seguridad para poder ingresar al inmueble, nos comentó que fueron bastante extremos para la porra del Atlas, hasta le quitaron unas monedas de $10 pesos, sólo les permitieron entrar prácticamente con sus dispositivos móviles y unos globos color negro y rojo para decorar su zona y alentar, lo que la porra hace normalmente.

Considera que todo fue una emboscada, y por supuesto la seguridad y el gobierno estuvieron implicados.