Mati Covarrubias presentó documental “La Bahía de mi Vida”

La vallartense Mati Covarrubias, comunicadora, empresaria, compositora, productora de ideas y música, en fecha reciente presentó sus coterráneos la película documental “La Bahía de mi Vida”, que concluyo después de tres años y 8 meses de trabajo, tiene como objetivo mostrar la belleza de la región a través de un contenido visual emotivo.

La obra gira en torno al ser humano y su relación con la naturaleza, presenta el encuentro con diez guardianes que dedican parte de su vida a la preservación de las riquezas naturales en la Bahía de Banderas y los pueblitos de la Sierra Madre Occidental, el objetivo es lograr una exposición tanto nacional como internacional de las grandes bondades de Puerto Vallarta, a través de una narrativa emotiva que promueva la atracción de visitantes.

Con este producto audiovisual busca generar conciencia sobre la preservación de los recursos naturales en Puerto Vallarta, conociendo más sobre su historia, ecología y ecosistemas, donde Mati vio la primera luz frente al mar, un 16 de septiembre, es la hija menor de Salvador Covarrubias y Lupita Sánchez, es bisnieta de Guadalupe Sánchez fundador de Las Peñas que dio origen a esta ciudad, aquí creció, llena de actividades de relación con la naturaleza, con un padre amoroso y aventurero, naturalista y adelantado a su época, y una madre altruista con un amplio trabajo social y comunitario.

A los 17 años salió de su lugar natal para ir a estudiar, y desde entonces, va y viene teniendo como base la ciudad de Guadalajara, sin olvidarse de Puerto Vallarta, pues se siente orgullosa de su origen.

“Honra a la madre a través de mi madre, pero a la madre tierra, a la madre montaña, a la madre montaña, es una vinculación entre la honra personal a mi madre y la honra y la importancia que tenemos de incluir a la tierra con sus valores en nuestro continuo progreso, también nos sensibiliza a darnos cuenta que estamos interconectados con todo el entorno: cualquier momento que podamos entender, algo que olvidamos, por ejemplo los bosques de oyamel y de pino que están en aquellas montañas, a casi 2 mil 500 metros tienen todo que ver con el agua de la llave que abrimos en la casa, en el hotel o el restaurante, no lo pensamos, pero en el grifo sale el proceso de la nube de la, de la sierra madre, de los ríos”, explicó.

Exalta la belleza de las montañas, ríos y especies, desde Cabo Corrientes hasta Punta de Mita, con una documentación extraordinaria de la visita de las ballenas, donde hilvana una historia particular, que también es universal: el amor por la naturaleza.

Se encuentra en la fase de la comercialización, busca introducirse en las principales plataformas internacionales de streaming. Agradeció el patrocinio de: Jorge Villanueva, Juan Vela, Gabriel Igartúa, Jorge Careaga, Eduardo Legorreta, Enrique Tron, Alejandro Guerra y Abel Villa, entre otros donadores.

“Empezamos con la preproducción, producción, filmación y la postproducción que tuvimos casi año y medio, trabajando en la banda sonora original, en todos los detalles de la edición y construcción de la película y la historia, nos encontramos ahora en la cuarta fase, estamos tratando de llevarla a Netflix Internacional con toda la esperanza que podamos negociar con ellos y convertirnos en un documento fílmico atractivo para la plataforma, la idea es que pueda ser vista, sentida y experimentada por millones de personas en el mundo. El patrocinio fue invaluable para mí, la película se hizo con capital privado, especialmente algunas empresas con las que estoy vinculado con mi esposo y la ayuda incondicional de empresarios locales”.

Destacó que el sentido es de muchas variantes, esperando influir en la economía de la región, con una extraordinaria filmación con un equipo de trabajo joven: Marisol García, Samuel Reséndiz, Isabel Hernández y Sebastián Tron, en las cámaras, documentando a Puerto Vallarta y Bahía de Banderas como nunca antes, que nos recuerda porque vivimos en este paraíso.

“Nos enfocamos en cómo nacen millones de cangrejos en el estero, por ejemplo, como tiene todo que ver el kril que va hasta afuera a las ballenas y se alimentan, como sus grandes colas se mueven y promueven el fitoplancton, como se formó la bahía a través del eje volcánico transversal y se movió hace millones de años…tenemos animaciones de la profundidad y la efectividad de lo que hace un árbol por nosotros, vemos la profundidad hasta 1 mil 500 metros de la bahía”, subrayó.