Otra vez firma Michel compromisos con manifestantes; piden agua potable y no sucia
Durante tres horas y media estuvieron bloqueadas las dos calles principales del centro histórico de Puerto Vallarta, debido a la manifestación de ciudadanos que reclaman agua de calidad y que ya no haya cortes en el suministro. El alcalde Luis Michel se comprometió a regularizar el servicio con agua limpia y a poner orden con las coordinadoras de Desarrollo Social.
A pesar del esfuerzo del Gobierno Municipal y Seapal Vallarta, ayer jueves cuando acudieron a Brisas del Pacífico a regalar tinacos y a registrar vecinos para la próxima entrega de materiales, para evitar que se realizara la marcha, pero el intento de boicot no prosperó y finalmente este viernes los afectados estuvieron desde las 7 de la mañana frente al hotel Sheraton este viernes.
Fue aproximadamente a las 8:30 cuando la comitiva llegó a la presidencia municipal y se dispusieron a bloquear la calle Paseo Díaz Ordaz, donde uno de los puntos que exigían era la destitución del director de Seapal, Jorge Alberto Castillo Núñez, quien no se presentó en ningún momento cuando el centro estuvo paralizado.
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Desde antes que arribaran los manifestantes estaban presentes el secretario general del Ayuntamiento, Felipe de Jesús Rocha, el jefe de atención a Usuarios de Seapal, Vidal Casillas y el comisario Rigoberto Flores Parra. En un momento determinado se llevaron a algunos representantes a una sala de juntas con engaños de que estaría el alcalde, pero al darse cuenta de que no iba a ser así, salieron del lugar más enojados y es cuando procedieron a bloquear la calle Juárez.
Después de ver que los vecinos no cedían, una comisión de diez personas fue invitada a la oficina del presidente municipal, quien escuchó pacientemente las quejas de los habitantes de las colonias de la parte alta de El Pitillal.
La principal molestia fue la falta de palabra del organismo por dejarlos sin agua desde el viernes 18 de agosto hasta la madrugada del miércoles pasado. Michel les explicó que fue debido a un tubo roto que ya fue reparado. No obstante, cansados de excusas los meses pasados, procedieron con la marcha para demostrar a los funcionarios municipales que no están jugando.
El punto más importante que reclamaron fue el agua sucia que sale de la llave. Pese a que el suministro se regularizó, continúa saliendo el agua turbia, con mal olor y sedimento. El acuerdo fue que se realizarían los estudios de calidad del líquido.
También los vecinos se quejaron amargamente de las coordinadoras de sector de Desarrollo Social, a quienes acusaron de no trabajar por la comunidad, vender las pipas y solo beneficiar a sus familias o sus conocidos.
Después del desahogo, hicieron que el alcalde firmara un documento con los compromisos, para lo cual aseguró que visitaría cada mes las colonias afectadas. Además, le pidieron que saliera a disculparse por no salir antes, a lo cual accedió Michel.
