Vivan los mexicanos triunfadores
El triunfo de Checo Pérez en el Gran Premio de Mónaco es un orgullo para México y los mexicanos.
De igual manera, la selección del antropólogo mexicano Eduardo Matos para el premio Príncipe de Asturias, es una distinción que enorgullece a México.
Ha sido el descubridor y director de las obras del templo mayor, en la CDMX.
La NASA ha seleccionado a Katya Echazarreta como la primera mujer mexicana en una misión espacial. Todo un logro de una mujer mexicana en la NASA. Otro triunfo de una mexicana.
A estos mexicanos triunfadores en sus ocupaciones debemos mucho, porque son un respiro de éxito, dentro del ambiente de fracaso y violencia en que estamos inmersos en nuestro país.
Como estos mexicanos triunfadores hay muchos en el mundo, colaborando, según sus posibilidades, poniendo en alto el nombre de México.
Muchas empresas han incursionado en el extranjero con empresarios valientes y capaces. Viajando por el mundo se encuentran Instalaciones de Cemex y Bimbo, entre otras, empresas orgullosamente mexicanas en países lejanos.
Estos éxitos ayudan a disminuir el ambiente que se percibe en nuestras ciudades, un pesimismo por las acciones del gobierno y por las cansadas y repetitivas apariciones del presidente en turno, en donde se respira el encono, frustración, agresividad, y un complejo de no poder convivir con personas que no le den la razón.
Como país, el estar oyendo y viendo diariamente todas estas actitudes negativas y agresivas, se meten como la humedad en el ánimo de los mexicanos, creando un nivel de ánimo negativo y perjudicial.
Por eso, estos triunfos de mexicanos en el mundo apoyan el optimismo de cambiar el país, fomentar la unión y la esperanza de tener un país triunfador, libre de comentarios diarios de violencia, narcotraficantes, insultos, ofensas y menosprecios.
Hay que celebrar estos triunfos y difundirlos, dudando que el presidente en turno los felicite, por soberbia, por complejo o por maldad.
Por lo pronto yo digo, “vivan los mexicanos triunfadores”.
