Tiró la 4T más de 450 MDP en obras inútiles en Bucerías

El pasado 29 de marzo del 2020, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador realizó una gira de trabajo por el estado de Nayarit para supervisar e inaugurar obras realizadas por la secretaría de Desarrollo Urbano y Territorial SEDATU.

En este caso en el municipio de Bahía de Banderas se llevó a cabo la construcción de obras no proyectadas ni prioritarias.

En esa fecha López Obrador se hizo acompañar por el secretario de la SEDATU Román Meyer Falcón, quien presentó el proyecto ya ejecutado y cuya inversión tuvo un costo total de 450 millones de pesos y que forma parte del programa de mejoramiento urbano, en esta obra se incluye el “Parque de Barrio” que recientemente fue galardonado en la V Bienal de Arquitectura en la Ciudad de México. Parque que no se encuentra abierto a los ciudadanos y se encuentra en total abandono.

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De entrada debemos mencionar que dichas obras, sobre todo el Malecón y reencauzamiento del Arroyo del Indio, causó un gran descontento entre los vecinos de la colonia Paraíso del Indio quienes señalaron una serie de fallas que en su momento fueron ignoradas por los ingenieros a cargo de la obra y que con el tiempo serían confirmadas, ya que se causaron inundaciones y daños a los vecinos que a la fecha no han sido corregidos.

En ese programa se supone que se trata de escuchar a los ciudadanos e incorporar sus necesidades primordiales y dotar de equipamiento, servicios básicos y la dignificación de los espacios públicos, pero en este caso nunca escucharon las necesidades de la gente y solo construyeron lo que ellos consideraron que era lo que necesitaba la gente para ejercer el recurso, el descontento sigue. 

Para la administración anterior, esta obra representaba un gran problema para el presupuesto municipal, ya que el simple trabajo de mantenimiento de las instalaciones deportivas, culturales y urbanas como es el caso del malecón mencionado antes que resultó peor ya que inunda las calles de lodo, basura y daña a quienes están en las cercanías. 

Se terminó la administración pasada y quienes todo el tiempo señalaron vicios ocultos en esa obra se fueron, y el Ayuntamiento no la recibió por completo. Parte de esa papa caliente se la pasaron al ejido Bucerías, ya que les entregaron para su administración el mercado para que se hicieran cargo del carísimo mantenimiento, pero resulta que el mencionado mercado hasta el momento sigue cerrado, a nadie le sirve la impresionante inversión federal.   

Las otras áreas siguen huérfanas, la biblioteca, el área cultural y deportiva, solo se usa por que el programa Bienestar lo ocupa para las jornadas de vacunación, aun así, la jardinería ya está muerta e invadida de maleza.

No cabe duda de que la presente administración ya le estará echando cuentas de cuánto dinero le bajará al presupuesto los costos de mantenimiento de esa malograda obra que representa un gran desperdicio de recursos, instalaciones de las que nadie se quiere hacer cargo y prefieren dejarla como está.

Esto es resultado de la necedad y soberbia institucional de no escuchar de verdad las necesidades de las personas y aplicar los recursos en donde hacen falta, en obras que de verdad la gente necesita.