Reforma contra nepotismo, colmo del cinismo en México (VIDEO)
En un país donde el nepotismo es prácticamente un deporte nacional, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha anunciado su intención de presentar una reforma legal para combatir esta práctica.
Sí, leyó usted bien. Justo cuando los apellidos como López, Alcalde, Taddei, Monreal, Batres y Godoy resuenan en la esfera pública como símbolos del acomodo familiar descarado, llega esta propuesta que parece sacada de un sketch de comedia.
La ironía de la situación no pasa desapercibida. En un gobierno donde las designaciones parecen seguir la lógica de “¿qué puesto quiere, primo?”, resulta casi hilarante escuchar sobre una cruzada contra el nepotismo.
Porque, claro, México lleva décadas padeciendo este cáncer, pero el actual gobierno de Morena se ha encargado de perfeccionarlo con un cinismo que roza el arte.
Desde secretarías clave hasta posiciones estratégicas en órganos autónomos, el árbol genealógico parece ser el único currículum necesario.
Pero no nos confundamos: esta iniciativa no es un acto de contrición. Es más bien un movimiento de manual para intentar blindarse de las críticas que, con justa razón, han señalado que estos gobiernos de la autoproclamada “cuarta transformación” han hecho del nepotismo y la corrupción sus pilares operativos.
Porque sí, combatir el nepotismo suena muy bien, sobre todo cuando uno ya acomodó a la prima, el hermano y hasta el sobrino en puestos clave.
¿Es este un intento de Morena por reescribir la narrativa antes de que los escándalos familiares sigan brotando como hongos? ¿O simplemente es una broma de mal gusto? Lo cierto es que, en un país donde todos sabemos quién es quién, hablar de “combatir el nepotismo” desde el poder es como un ladrón hablando de honestidad.
El discurso oficial, siempre cargado de promesas de transformación, parece estar perdiendo su poder de convencimiento. Y es que, entre más hablan de combatir prácticas nocivas, más se enredan en sus propias contradicciones.
La gente ya no necesita que le expliquen cómo funciona el nepotismo; lo vive a diario, lo observa en cada designación y, ahora, lo escucha con sarcasmo disfrazado de preocupación oficial.
Quizá esta reforma sirva para algo, aunque sea para confirmar que, en México, la hipocresía política sigue siendo uno de nuestros productos más exportables.
EU