¡Premio a los feminicidas!

0
144

¡Premio a los feminicidas cada día que Obrador evita aplicar la pena capital!

Y, ¡cada día se reportan varios feminicidios y homicidios en nuestro querido México!

Descomunal vanidad presidencial, que prefiere la complicidad, con tal de aparentar una enfermiza pureza de ánimo para perdonar por su cuenta, a la delincuencia.

Cualquier aprendiz de psicología elemental, dirá que trata de encubrir aquel señalamiento de que su hermano murió de un balazo, estando Andrés Manuel, acompañándolo.

Así, hace unos días lo oímos declarar que hay que respetar a los delicuentes.

Y cotradictoriamente también manifiesta repetidamente, que se asombra que haya delicuentes que no pierden ni su respetabilidad. ¡Vaya bipolaridad exhibicionista!

¿Y ni como ayudarlo? Porque los delitos de secuestro, de desapariciones, de feminicidios y hasta del huachicoleo siguen impunemente sin la sanción ejemplar que es la pena capital.

En los sondeos que hace desde hace años, un servidor, no llega a el uno por ciento, que se oponen a la medida, que por respeto a los perros, pedimos disculpa, cuando sirven de ejemplo al señalar la frase filósofica plena de sabiduría: “MUERTO EL PERRO SE ACABÓ LA RABIA” . 
 
Y el mayor argumento de oposición es que se presta a equivocaciones, mas debe aplicarse con la seguridad, como en los casos de los reincidentes.
 
Obrador, según los archivos de la UNAM, tardó muchos años en recibirse pero ello se puede justificar porque trabajaba y sí,  apreciamos es mucho más trabajador que los mandatarios que reseña como traidores de la Patria. Y hubieran acabado con ella, si hubiesen sido más laboriosos en sabotear a la Nación. Sin duda.
 
Por lo anterior, ¿cuántos años necesitará para asimilar que la violencia es sanadora también. Cualquier código penal es un catálogo de violencia constructiva en favor
de limitar las conductas antisociales.

¿Cuánto tiempo su necedad imperial, le impone repetir la frase: “Violencia trae violencia” y se pasa por alto que la violencia es vital hasta para no morirse el
mismo. ¿Qué son las vacunas sino violencia sanadora?

¡Y aún así repite: “ES DE SABIOS CAMBIAR DE OPINÓN”.
 
Y gracias por la lectura de hoy, y por reproducir el mensaje.

EtiquetasFeminicidios