Urge plan municipal de desarrollo para crecimiento de Bahía

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Una actividad constante en la región, es la venta de terrenos rurales para familias con pocas posibilidades de acceder a viviendas de programas federales, que por necesidad buscan este tipo de espacios lejos de zonas urbanas. 

Esto sucede porque los lugares donde se ofrecen, están lejos de los servicios básicos, como es el caso de Bahía de Banderas, donde los terrenos para plantar un hogar, se encuentran en zonas rurales, como en la carretera Bucerías y Valle San Juan de Abajo. 

La tendencia es que les surge la necesidad de contar con los servicios básicos cuando se van a vivir a dicho predio, pero al no estar a la vista el vendedor del terreno, solo queda exigirle al gobierno los servicios que de entrada, debemos decir, son un derecho humano.

El secretario del Ayuntamiento de Bahía de Banderas, Anastasio Zaragoza, señaló con respecto a este tema, que este fenómeno del crecimiento desmedido de la población, en un municipio donde hay trabajo y recursos, se debe a las personas que llegan vivir a Bahía del sur de la entidad. 

Dijo que esto es muy bueno, porque se requieren fuentes de empleo, sin embargo con el tiempo se generan necesidades como la de tener vivienda, por lo que buscan un lotecito para vivir.

Así mismo, genera que se produzcan fraccionamientos donde la gente ve la oportunidad de poder vender sus tierras de manera fraccionada, sin existir la cultura del orden y hacer las cosas como deben de ser. 

Primero porque a la mejor los terrenos donde pretenden vender no son del uso de suelo adecuado, el Ayuntamiento no les va a dar el permiso de fraccionar y construir lo que se convierte en un problema, ya que lo único que quieren, es vender. 

Luego tienen que buscar quien les brinde los servicios, solo les queda acudir al ayuntamiento, porque el que vende, no tiene la manera de brindar los servicios básicos como son el agua potable, luz y alumbrado público, todo esto, se convierte en una carga financiera para el municipio. 

Señaló que la única manera de prevenir esta situación, es meter orden con más vigilancia, para que en cuanto se detecte ese tipo de actividades, se pueda detener la venta de terrenos y clausurarlos hasta conocer tanto el proyecto como a la viabilidad de este.   

De ahí reviste la importancia de contar con un plan municipal de desarrollo, que servirá precisamente, para que el orden se cumpla de acuerdo con los estudios realizados de los proyectos, lo que evitaría que los en terrenos se mezclen viviendas con bodega y terrenos industriales que puedan poner en riesgo a las familias.