Día Internacional del Tatuaje: Celebra la tinta en la piel

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Para muchos, los tatuajes representan un accesorio como cualquier otro, con la diferencia de que se encuentran plasmados de manera “permanente” en la piel, sin embargo, para otros representan algo más, es decir, una expresión de arte que acompaña todo el tiempo.

Debido al alcance y atracción que comenzó a generar el ver a los tatuajes como una forma de expresar arte, un grupo de tatuadores de Estados Unidos denominó al 17 de julio como el “National Tattoo Day” o “Día Nacional del Tatuaje”, una celebración que poco a poco se extendió a nivel internacional. 

El objetivo del Día Internacional del Tatuaje es destacar la importancia de plasmar lo que más queremos a través de la tinta en el cuerpo, convirtiéndose en una expresión corporal que refleja gran parte de la identidad de los portadores y de sus creencias

Sin embargo, el arte del tatuaje no siempre fue visto de esta forma, ni pensado para estos fines, pues su origen data del año 3250 a.C.

Del antiguo Egipto al mundo moderno: La evolución de los tatuajes

El origen de los tatuajes se remonta a la Edad de Cobre, donde habitó un hombre identificado como Ötzi y que al ser enterrado luego de su muerte, su cuerpo se momificó y permitió que en 1991 se descubriera que portaba cerca de 61 tatuajes en todo el cuerpo

Se dice que los primeros tatuajes eran simples y geométricos, y que tenían un significado religioso o espiritual.

Fue durante la Edad Media cuando los tatuajes se hicieron más populares en Europa, pues se utilizaban para marcar a los criminales, los soldados y los esclavos. Por otra parte, en Estados Unidos se hicieron populares en el siglo XIX y se asociaban con la delincuencia y la marginalidad.

México no es la excepción, pues el origen de los tatuajes data desde hace mucho tiempo y tiene una larga tradición, ya que antes de la Conquista de 1492, los pobladores de las culturas existentes se hacían modificaciones corporales con fines festivos, decorativos y espirituales a través de los tatuajes y otras prácticas. 

Sin embargo, fue hasta el siglo XX cuando el tatuaje comenzó a ser visto como una forma de expresión artística y personal, pues se popularizó entre las celebridades y la gente común, convirtiéndose en una práctica normalizada en todo el mundo.

Poco a poco la práctica del tatuaje ha perdido los estigmas y prejuicios que la caracterizaban, propiciando que hoy en día el tatuaje sea visto como un arte y exista la conmemoración del Día Internacional del mismo.

 

 

Dulce Cruz