Cae la ocupación en Vallarta; hoteles operan en números rojos
El presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Puerto Vallarta, Álvaro Garciarce Monraz, informó que están registrando números rojos en la ocupación hotelera, por lo que este mes pudieran cerrar entre un 7 a 12%, debido a las fuertes restricciones de viaje establecidas para los norteamericanos y las largas cuarentenas que deben de pasar.
Por lo que nuevamente se ha recurrido a los descansos solidarios con los trabajadores, ya que no hay muchos huéspedes.
“Todo el esquema del trabajo es de acuerdo al porcentaje de ocupación que se tenga y cada hotel dependerá de diferentes alternativas y está claro que en las circunstancias de alguna manera complicadas con el año anterior que todavía en esta temporada estaba al tope la hotelería”.
Sin embargo, recordó que a partir del 15 de marzo del 2020 se registró una caída de ocupación y después tuvieron los hoteleros que tomar la decisión de hasta cerrar los establecimientos de hospedaje por varios meses.
“En este momento nosotros estamos apostando mucho para lograr posible flujo de turismo extranjero y por otro lado estamos trabajando para que los mercados que siempre hemos tenido como es Bajío, Zona Metropolitana, Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, entre otros para seguir teniendo dichos mercados para que nos ayuden a superar estos difíciles momentos que está pasando el turismo”.
Comentó que no se han registrado despidos masivos, solo los descansos solidarios, vacaciones y otras estrategias que los hoteles llevan a cabo. Por lo que se está cuidando la plantilla laboral para que sea la menos afectada.
Por ello, recordó que están ofreciendo facilidades a viajeros de Norteamérica, en respuesta al requerimiento de mostrar una prueba Covid-19 negativa antes de regresar a casa.
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De este modo, el sector turístico y en particular la hotelería, han establecido una alianza con el sector de salud de Puerto Vallarta para ofrecer un servicio de calidad, bilingüe y con precios competitivos para la realización de la prueba que es un requisito para viajeros de Canadá y Estados Unidos, antes de abordar un avión y regresar a sus países de origen.