¿Por qué el agua de las albercas se pone verde?

Un análisis científico de los factores detrás del color verdoso en las piscinas y su impacto en la salud
0
1157
Por qué el agua de las albercas se pone verde

La reciente clausura de la alberca olímpica de la Unidad Deportiva Alfonso Díaz Santos en Puerto Vallarta debido a que el agua adquirió un tono verdoso ha generado preocupación entre los usuarios.

Algunos atribuyen este fenómeno a la falta de mantenimiento, mientras que otros señalan la temporada de lluvias como la causa principal. Sin embargo, ¿qué dice la ciencia sobre el porqué del color verde en el agua de las albercas?

El cambio en el color del agua de las piscinas generalmente se debe a la proliferación de algas, organismos fotosintéticos que prosperan en ambientes húmedos y cálidos.

Conoce las noticias más relevantes en nuestro canal de WhatsApp

Estas algas pueden aparecer si no se realiza un mantenimiento adecuado, especialmente en la cloración y el equilibrio químico del agua. La cloración insuficiente permite que las algas crezcan sin restricciones, tiñendo el agua de verde.

Otro factor que contribuye al cambio de color es el pH del agua. Durante la temporada de lluvias, el agua de lluvia, que es ligeramente ácida, puede alterar el equilibrio químico de la piscina, afectando la eficacia del cloro.

Un pH desequilibrado no solo reduce la capacidad del cloro para eliminar microorganismos, sino que también favorece la proliferación de algas.

El color verde no necesariamente indica que el agua es dañina, pero sí es un signo de que no está en condiciones óptimas.

El crecimiento de algas puede hacer que el agua se vuelva turbia y resbalosa, lo que representa un riesgo físico, especialmente para nadadores.

Además, las algas pueden albergar bacterias que, aunque generalmente no son peligrosas en sí mismas, podrían indicar que la desinfección es inadecuada, lo que incrementa el riesgo de infecciones cutáneas o gastrointestinales.

Finalmente, el agua verde en las albercas es un indicador de problemas en el mantenimiento y en el equilibrio químico. Si bien no siempre representa un peligro inmediato para la salud, es fundamental que se realicen las correcciones necesarias antes de que los usuarios vuelvan a utilizar la piscina, garantizando así un ambiente seguro y saludable para todos.

 

AT

Autor

  • Hugo Lynn

    Licenciado en Periodismo por la escuela Carlos Septién; tiene estudios en administración pública por la UnADM y estudios de posgrado en gestión política en la George Washington University en Washington D.C. Ha sido reportero y corresponsal de El Universal, W Radio, 8 Columnas, la triple A y Tribuna de la Bahía. Ha sido director editorial de Mercurio, jefe de información de Meridiano, director de Noticias en Digital 90.3, Radiorama, Televisa Radio y CPS Media.

    Ver todas sus publicaciones