Parroquia de Guadalupe recuperó la “Casa del Padre” y no será edificio
Después de un largo litigio al parecer la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe recuperó la llamada “Casa del Padre”, inmueble ubicado a espaldas de este emblemático templo y que da a la calle Matamoros en la céntrica colonia El Cerro de Puerto Vallarta, espacio del que se quiso apropiar el sacerdote Carlos Peña y su familia, el tema fue muy mencionado en los últimos meses, pues corrió la versión de que lo habían vendido y existía un proyecto para construir un edificio justo al lado de la cúpula, al respecto el párroco Arturo Arana evadió abundar en detalles, solamente indicó que ahí ya funciona el programa asistencial “Cáritas” para brindar alimentos a los más necesitados.
El problema se remonta a mediados del siglo pasado, cuando estaba el señor cura Rafael Parra y llegó como su auxiliar el entonces joven y recién ordenado padre Carlos Peña, acompañado por su madre y hermana, como era costumbre atrás de la sacristía se les ofrecía un espacio para hospedarse, con el tiempo lo nombraron párroco fundador del templo de Nuestra Señora del Refugio, a dónde se mudó cuando pudo, pero su familia permaneció en el sitio de manera temporal, por un acuerdo con el representante de la iglesia, pero después indebidamente se negaron a entregar el inmueble.
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El obispo de la Diócesis de Tepic, Luis Artemio Flores Calzada, a cuya jurisdicción pertenecen las parroquias de Puerto Vallarta, le tocó dirigir la defensa del patrimonio de este centro religioso:
“Me duele un poco decirlo, pero al padre Carlos se le prestó la casa donde vive de parte de la parroquia, para que él viviera, puesto que ya era párroco del Refugio y no había casa, ¡se le prestó!, ahí un documento, donde él mismo me dijo, señor obispo aquí está este escrito en donde yo quedé con el vicario general en aquel entonces, ahora obispo Lerma, y el ecónomo de la diócesis, que una vez que muriera mi hermana yo entregaba el edificio, pues resulta que ya murió la hermana y el edificio no lo ha entregado…
Por ahí he escuchado que hay cierto, habría que checar bien, como si él fuera el dueño. ¡Y eso es falso!, ese edificio es de la iglesia, por lo tanto, yo puedo decir de la comunidad de Vallarta, porque los bienes de la iglesia son de los católicos y la iglesia es Vallarta”.
El obispo reveló situaciones delicadas, por las que el inmueble estuvo en manos del sacerdote jubilado Carlos Peña, que mucho se dijo pretendieron vender para un desarrollo condominal o de departamentos, como tantos que últimamente se levantan en el centro de Puerto Vallarta, por lo que en su momento el prelado Flores Calzada advirtió:
“Si ustedes se dan cuenta es parte del edificio de la casa parroquial, y si alguno se anima a comprarla, sepa que va a comprar problemas”, advirtió desde hace tiempo.
Hoy trascendió que se recuperó la finca y vuelve la tranquilidad a los vecinos y defensores de la imagen visual y estilo arquitectónico de la ciudad, que es uno de sus principales atractivos turísticos.
EU