Emotiva presentación del libro “Aquellos (mis) Ojos Verdes” de Nelly Galván

Llena de nostalgia, emotividad y anécdotas resultó la presentación del libro “Aquellos (mis) Ojos Verdes”, de Nelly Galván Duque Tamborrel, apenas fallecida el pasado 20 de octubre a los 99 años, 66 de los cuales vivió en Puerto Vallarta, donde se convirtió en una leyenda, como restaurantera, diseñadora de modas, publirrelacionista, socialité, pachanguera, pintora, viajera y altruista.

En la Biblioteca Los Mangos se dieron cita alrededor de 150 amigos y familiares de la admirada Nelly, en el lanzamiento de sus memorias, que son un homenaje a la vida y un testimonio del cambio de Puerto Vallarta de pueblo a ciudad. Como era su deseo, se presentó esta obra literaria que consta de 160 páginas, con fotos que ya son históricas, mismo que está a la venta en este centro cultural.

Murió a los 99 años Nelly Galván-Barquet, una leyenda vallartense

El libro fue presentado por María José Zorrilla, quien es columnista y promotora cultural, fue amiga cercana de Nelly, quien dio cuenta más allá del aspecto social, desde su infancia y contrastes que vivió.

“Es una pequeña Joya… Fue un personaje vinculante entre la comunidad extranjera y la comunidad mexicana, representó a México en muchos eventos turísticos, cosa que yo no sabía, en ferias, durante la visita de Nixon fue la que arregló la cena presidencial, creo que es un personaje que se desenvolvió en muchísimos ámbitos, el cultural, social, político, empresarial, el urbano, el embellecimiento… la verdad vale la pena, las anécdotas que están en ese libro son fantásticas, con mucha picardía, con mucha naturalidad, creo cualquier gente que se interesa en la vida de Puerto Vallarta debe conocer este texto, porque toca aspectos muy diferentes a otros libros muy valiosos”.

El escritor Diego Arrazola fue el editor de la obra, además convivió bastante con la ojiverde Nelly, a quien describió como fascinante, amena conversadora, bilingüe, creativa y quien se ganó un lugar en Puerto Vallarta como protagonista de primer nivel, y que, al contrario de lo acostumbrado, detrás de ella una gran mujer estuvieron dos grandes hombres de la talla del arquitecto Guillermo Wulff y el escultor Ramiz Barquet, sus dos maridos.

“Yo recibí un documento que poco a poco se fue preparando, lo revisé, completé con entrevistas que le hice a Nelly, reescribí parte del documento, lo organicé, hicimos un cierre. Es una lectura maravillosa, no solo a la vida de Nelly, sino haber editado sus memorias, fue una aventura fantástica y un viaje por Vallarta desde 1957 que ella llegó, empezando por la vida de Nelly, ella cuenta su infancia, nació en los años 20 en la Ciudad de México y tuvo una vida muy interesante, es una aventura de vida que vale la pena conocer”.

La presidenta de la Fundación Alas de Águila, Eva Contreras de González, también fue presidenta del Sistema DIF Vallarta y recordó el apoyo que le brindó Nelly en sus tareas asistenciales, dando trabajo a las “Marías”, madres solteras y becas a menores, trajo a la memoria también cuando llegó a Vallarta a finales de la década de 1980 y fue al restaurante Las Palomas, ahí Nelly elegante y con una gran sonrisa le dio la bienvenida.

“Me alcanzó a dedicar el libro, platiqué con ella sobre diferentes anécdotas, vivencias… y les digo cómprenlo, se van a reír, van a viajar, van a disfrutar. Sé que Nelly en estos momentos me está escuchando con sus dos grandes amores: Guillermo y Ramiz, también su hijo Memo, también sus nietos. A Lupe, Ana y Luis, les digo su mamá siempre estará en su corazón como en el mío, cuando estuve en el DIF fue creativa, participativa, comunitaria, me apoyó con las Marias y los niños de la calle, hicimos un programa dando becas para estudiar”.

En la ceremonia participó su hijo Luis Wulff, quien narró las últimas cansadas horas de Nelly y las recomendaciones que dejó para su funeral, agradeció el acompañamiento de la gente. Después su hija mayor, Ana, la recordó y compartió, les deja un gran paquete y ejemplo a seguir.

“Mi mamá fue una gran mujer, convivimos, una familia muy unida. Para mí es un paquete muy grande lo que nos deja, porque ahora tenemos que hacer cosas mejores de lo que ella hizo… como trabajo, como nos sacó adelante a la familia, nos mandó a Estados unidos a estudiar, ella pagó la escuela, nos llevó a Guadalajara dizque para que nos casáramos muy bien, lo cual no le hicimos caso… hizo que mi papá siempre trabajara, ayudó a Ramiz a vender sus esculturas”.

Esa noche leyeron algunas cartas dedicadas a Nelly, sus descendientes, quien alguna vez dijo que no podría estar fuera de esta tierra, donde tuvo todo.

EU