Vecinos de Bucerías prefieren más tranquilidad y menos bares
El pasado 26 de mayo, concluyó el tiempo para la revisión de las 1, 046 observaciones y comentarios que se recibieron en las mesas de trabajo y consultas públicas para la actualización del Plan Municipal de Desarrollo Urbano de Bahía de Banderas, en donde destacaron algunos cambios de uso de suelo.
La directora del Instituto Municipal de Planeación, IMPLAN, Beatriz Martínez Sánchez, ponderó el caso de la panorámica y atractiva Zona Dorada, en la privilegiada franja frente al mar de Bucerías, donde se advierte un gran crecimiento inmobiliario, pero los vecinos piden conservar su tranquilidad.
Señaló que se considera habitacional: “Ellos quieren continuar con ese desarrollo, es una zona que no aguanta más presión el territorio, se va a quedar en la misma altura, nada mas con la regulación de la actividad que se viene realizando en las primeras calles de esa colonia”.
Informó que habían propuesto ocho niveles para los edificios, pero quedarán en 6; “Solamente con la regulación en el corredor urbano, en la parte que ya tienen como económica, para evitar que se pongan comercios de alto impacto”, puntualizó.
La licenciada Martínez explicó que buscan poner candados, para que sean comercios que den servicio a los propios vecinos, sin un impacto negativo, como bares y centros nocturnos, cuyo ruido no serían compatibles con una zona habitacional.
RECONOCER QUE EN TERRENOS AGRÍCOLAS SEMBRARON CASAS
Otra situación importante es el cambio de vocación, pues en el plan vigente que data del 2002, “Son agropecuarias, aunque ya hay casas ahí, entonces habrá que hacer el reconocimiento de esos cambios en el medio físico…la transformación que se dio con el tiempo”.
Este crecimiento habitacional, señaló, se dio más en la llamada Zona Valle, principalmente en las comunidades de San Vicente, San Juan de Abajo y San José del Valle, donde se asentaron muchas viviendas en terrenos clasificados como agrícolas, “Pero hoy por hoy se sembraron casas y hay que reconocerlo”, asentó.
De acuerdo a lo programado, ahora buscarán que sea aprobada la actualización por el Consejo, después al Ayuntamiento y por último al Estado, a través del IMPLAN para analizar la congruencia de la propuesta