Donald Trump confirma ataque terrestre contra cárteles en Venezuela: “Esa zona ya no existe”
AFP
Desde su residencia en Mar-A-Lago, el presidente Donald Trump hizo una revelación que marca un punto de inflexión en la política exterior de su administración: fuerzas estadounidenses ejecutaron el primer ataque terrestre en territorio venezolano.
La operación tuvo como objetivo principal una zona portuaria estratégica utilizada por el narcotráfico. Según detalló el mandatario, la incursión resultó en una “gran explosión” que neutralizó la logística de los grupos criminales en la costa.
Un golpe directo al narcotráfico
Donald Trump explicó que el ataque se concentró en los muelles donde se cargan embarcaciones con estupefacientes.
“Atacamos todas las lanchas y la zona de operaciones. Esa zona ya no existe”, sentenció con firmeza antes de iniciar una reunión con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Al ser cuestionado sobre la autoría directa de la misión y la posible participación de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), el presidente prefirió mantener la discreción, aunque confirmó que ocurrió a lo largo del litoral.
“Sé exactamente quién fue, pero no quiero decirlo”, añadió.
Acusaciones contra el Palacio de Miraflores
El mandatario justificó la escalada militar señalando que el gobierno de Nicolás Maduro ha convertido el tráfico de drogas en un negocio de miles de millones de dólares. Sin embargo, sumó una acusación de igual gravedad.
“Han enviado a nuestro país a cientos de miles de personas procedentes de cárceles, instituciones psiquiátricas y manicomios”, denunció Trump, vinculando directamente a Maduro con la crisis de seguridad en las fronteras estadounidenses.
Bloqueo total y el objetivo final
Esta acción militar no es un hecho aislado. El mes pasado, la Casa Blanca designó al gobierno venezolano como una organización terrorista extranjera y estableció un “bloqueo total” contra los buques petroleros sancionados.
Por su parte, la jefa de gabinete, Susie Wiles, sugirió recientemente en una entrevista para Vanity Fair que el horizonte de estas maniobras es claro: un cambio de régimen en la nación sudamericana.
El mensaje para Maduro: “Si quiere jugar rudo”
Respecto a la relación diplomática, Donald Trump confirmó haber mantenido una conversación telefónica con Maduro, aunque aclaró que la llamada fue infructuosa.
La semana pasada, el líder estadounidense ya le había recomendado abandonar el poder si era “inteligente”. Para finalizar, Trump lanzó una advertencia sobre la capacidad bélica desplegada en la región.
“Tenemos una armada masiva, la más grande que hemos tenido jamás en Sudamérica”, afirmó.
El mensaje de cierre para Nicolás Maduro fue contundente:
“Si quiere jugar rudo, sería la última vez que podría ponerse rudo”.
