TRABAJO DEL GOBIERNO MUNICIPAL…Determinante apoyo frente a contingencia

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TRIBUNA DE LA BAHÍA

Puerto Vallarta, Jal.- El apoyo del gobierno municipal al Seapal Vallarta, ha sido determinante para mitigar los daños y el impacto ambiental que provocó el derrame de aguas negras por el colapso en el colector centro-norte, que obligó el cierre de playas a bañistas al norte de la ciudad.

Lo anterior dejó de manifiesto el alcalde Arturo Dávalos Peña, durante la reunión de este martes con directivos del organismo operador del agua y representantes de las diferentes instancias federales y estatales involucradas, donde refrendó el respaldo de su gobierno en las acciones de restauración y remediación que se llevan a cabo en la zona afectada

En esta reunión, Dávalos Peña reiteró que se mantendrá la alerta sanitaria en las playas del norte de la ciudad, hasta en tanto las autoridades competentes, en este caso la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ), a través de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado (Coprisjal), determinen que estos espacios ya son aptos para el uso recreativo y no representan ningún riesgo para la salud de las personas.

Ello, indicó, aún cuando los monitoreos más recientes de la SSJ en las diferentes playas del puerto, arrojan que la mayoría de estas se encuentran muy por debajo de los parámetros establecidos, de menos de 200 enterococos por cada 100 ml. de agua. “Se continuará con el monitoreo para descartar al cien por ciento cualquier riesgo y se estará a la espera de lo que determine la Coprisjal para reabrir las playas”, enfatizó el primer edil.

Dijo además que se mantendrá el apoyo del personal de Protección Civil en la vigilancia de estos espacios, así como de la dirección de Obras Públicas en los trabajos de restauración de la zona afectada.

Al respecto, el titular de esta dependencia, Oscar Castellón Rodríguez, informó que desde el primer momento de la contingencia, se estuvieron apoyando las labores con maquinaria pesada y personal, para coadyuvar a mitigar los daños en el estero el Salado, mediante la construcción de bordos de protección en una de las parcelas aleñadas.

Indicó que con la autorización del propietario de esta parcela, se realizó un dique de 140 metros de largo, tres de alto y cuatro de corona, que sirvió como vaso de infiltración (regulador) para lograr contener el derrame de aguas negras al estero y con ello disminuir los daños a este ecosistema.