Sacerdote Ernesto Baltazar fue drogado y asesinado por escort y cómplices en Edomex: Fiscalía
Foto: redes sociales
El homicidio del sacerdote Ernesto Baltazar Hernández Vilchis, cuyo cuerpo fue localizado dentro de un canal de aguas negras en Nextlalpan, Estado de México, continúa revelando detalles clave conforme avanza la investigación de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
A casi una semana del hallazgo, la autoridad estatal confirmó que el párroco fue víctima de una ‘gotera’, drogado con clonazepam y posteriormente asesinado. El caso ya dejó tres detenidos: Fátima “N”, María Fernanda “N” y Brandon Jonathan “N”, quienes ahora enfrentan procesos por desaparición cometida por particulares y homicidio calificado.
A continuación, la línea de tiempo del caso.
31 de octubre: Reportan la desaparición del sacerdote
La Diócesis de Cuautitlán informó el 31 de octubre que el sacerdote Ernesto Baltazar se encontraba desaparecido.
La ficha de búsqueda señaló que había sido visto por última vez el 27 de octubre en Tultepec.
Sin embargo, investigaciones posteriores determinaron que la desaparición real ocurrió el 29 de octubre, fecha en la que el sacerdote fue visto con una de las implicadas.
29 de octubre: La última vez que se le vio con vida
La FGJEM estableció que ese día el sacerdote salió de su domicilio y acudió a un hotel en Tultitlán acompañado de Fátima “N”.
Horas después, ambos se trasladaron en el vehículo del párroco a un domicilio ubicado en la Unidad Habitacional Morelos, Tercera Sección, propiedad de Brandon Jonathan “N”.
En ese lugar, según la Fiscalía, los tres consumieron alcohol y drogas.
Ahí ocurrió el homicidio.
La mecánica del crimen: clonazepam y un golpe fatal
En la primera audiencia, la Fiscalía reveló que:
Fátima “N”, quien trabajaba como escort, mantenía encuentros con el sacerdote desde hace un año.
Tras convivir en el hotel, le administró gotas de clonazepam, lo que hizo que Ernesto Baltazar se quedara dormido.
Mientras estaba inconsciente, intentaron robarle sus pertenencias.
El sacerdote despertó e intentó defenderse.
Brandon Jonathan “N” lo golpeó en la cabeza con un bate metálico, causándole la muerte.
30 de octubre: Abandonan el cuerpo en Nextlalpan
Según la Fiscalía, María Fernanda “N”, pareja de Brandon, llegó al domicilio para ayudar a deshacerse del cuerpo.
Ese mismo día trasladaron los restos del sacerdote a un canal de aguas negras en Nextlalpan, donde lo abandonaron.
Posteriormente, en un cateo, la FGJEM encontró en el domicilio del crimen:
ropa del sacerdote,
pertenencias personales,
una estola,
y rastros hemáticos.
9 de noviembre: Cateo y avance clave en la investigación
La Policía de Investigación rastreó el vehículo del sacerdote hasta Hidalgo, donde se solicitó apoyo de la Procuraduría local.
Las cámaras revelaron que el coche era acompañado por una motocicleta, cuyo dueño reconoció haberla prestado a Brandon Jonathan “N”.
Con esa información, el 9 de noviembre se realizó el cateo al domicilio donde ocurrió el homicidio.
11 de noviembre: Hallazgo del cuerpo
Peritos y agentes de la FGJEM localizaron el cuerpo el 11 de noviembre en Nextlalpan.
Tras la confronta genética, se confirmó oficialmente que se trataba del sacerdote.
La Diócesis de Cuautitlán emitió un mensaje lamentando su muerte.
Ese mismo día fueron detenidos María Fernanda “N” y Brandon Jonathan “N”.
El 13 de noviembre, la captura alcanzó a Fátima Isabel “N”.
17 de noviembre: Segunda orden de aprehensión
La Fiscalía cumplimentó una segunda orden de aprehensión contra los tres implicados, ahora por homicidio calificado.
La investigación también reveló que la presunta gotera habría vendido la camioneta del sacerdote por 37 mil pesos en Actopan, Hidalgo, con apoyo de un ex convicto.
Los tres detenidos permanecen bajo prisión preventiva justificada.
