Inician restauración de la cúpula del Templo de Guadalupe, símbolo de Vallarta

El sacerdote Arturo Arana López, párroco del céntrico Templo de Nuestra Señora de Guadalupe, el más antiguo y simbólico de Puerto Vallarta, dio a conocer que iniciaron esta semana los trabajos de restauración de la cúpula que esta sobre el altar principal, se pueden ver en su exterior ya los andamios y trabajadores, alterando una de las postales infaltables para los turistas.

“Hemos empezado estos trabajos, algunos dicen de mantenimiento, no, es de restauración, porque la cúpula presenta 16 grietas por donde se nos está filtrando el agua y tenemos problemas de humedad al interior del templo, es un proyecto en el que nos tenemos que involucrar todos los vallartenses, no solo los católicos o los que amamos esta parroquia, es icónico el templo de Guadalupe de Puerto Vallarta, le da proyección a todo el destino a nivel mundial”, destacó el padre Arturo.

Un templo con historia

Esta obra arquitectónica tiene su historia. El 15 de abril de 1883 coloca la primera piedra del templo del entonces poblado de Las Peñas, en medio de la falda del cerro, protector contra el tiempo, en el lugar más precioso, donde hasta hoy se yergue la parroquia. En 1892 existía una capilla de adobe. El 12 de octubre de 1921 se eleva a parroquia, siendo el primer párroco el padre Francisco Ayala, quien había llegado en 1915 de San Sebastián del Oeste.

Con mucha visión el padre Ayala en octubre de 1916 inició la construcción de un nuevo templo digno de las exigencias de la naciente comunidad, el proyecto fue de gran dimensión para la entonces pequeña población, incluso de tres naves. Se le veía en una mula recogiendo cooperación para la obra, en canoas desde Las Viudas Nayarit, traían cal, cemento y piedras.

El presbítero Luis Robles Corona fungió como párroco de 1932 a 1942, edificó la bóveda del lado sur, siendo el maestro constructor don Pedro de la Cruz, auxiliado por el comité que el señor cura anterior, José Ramírez, formó para recabar fondos, construyó la gran cúpula de febrero a octubre de 1939, tomaron parte en la obra los mismos albañiles que levantaron las bóvedas centrales: Antonio Murillo, Gerónimo Murillo, Lino Mercado y Rafael Rosas.

Por mucho tiempo la cúpula fue la parte más visible del templo de Guadalupe, desde cualquier punto del pueblo se le podía observar, hasta que en 1963 el señor cura Rafael Parra concluyó la torre y corona, la emblemática cúpula fue restaurada ya en la década de 1990, pero requiere hoy de nuevo ser intervenida.

Tres millones de pesos se requieren para su rescate

“Ahorita se esta despegando todo el azulejo, para poder sellas las 16 grietas que tiene, después se pondrá fibra de carbono, que no solo protegerá de la humedad, también en caso de temblores más difícilmente podrá romperse esta cúpula, yo creo que de todo el material que se va a utilizar este es el mas costoso la fibra de carbono, pero según los expertos es muy durable, después de eso pondremos de nuevo el azulejo, el presupuesto llega casi a los tres millones de pesos…afortunadamente durante el docenario de las peregrinaciones, varias empresas trajeron donativos, además con lo que el turismo extranjero ha depositado en unas alcancías, se va consiguiendo el recurso y desde ayer hemos empezando con segundas colectas después de cada misa”, explicó.

El padre Arana dio a conocer que en abril concluirán los trabajos, señaló que en fecha próxima dará a conocer las actividades para recabar fondos, mientras a quienes tengan la buena voluntad de cooperar, los invitó a llevar sus donativos a las oficinas parroquiales, donde la secretaria les entregará un recibo, o directamente con él al finalizar las misas.

GC