Regulándose los ejidos se acabaría asentamiento irregular en Bahía

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Bahía de Banderas, Nay.- La falta de regulación de los ejidos de Valle de Banderas y La Cruz de Huanacaxtle ha contribuido en el aumento de delitos de fraude, certidumbre de tierra y problemas de falta de servicios básicos en el municipio, lo que ha permitido que se tengan invasiones y venta indiscriminada de terrenos, según informó la dependencia de Desarrollo Urbano. Matías Verdín, Titular de la dependencia, informó que el día que todos los ejidos logren regularizarse se podrá tener menos problemas en el tema de la regulación de predios y no habría pretexto para no tener certidumbre de tierras en Bahía de Banderas. Dijo que el tener un título de propiedad, por parte de los responsables, facilitaría el desarrollo de nuevos fraccionamientos regulares, sin tener ninguna problemática que pueda poner en riesgo la inversión de la ciudadanía, además que, esto traería mayores beneficios para los ciudadanos y las empresas fraccionadoras, donde se hablaría de un fraccionamiento social progresivo, popular o de interés social. Indicó que, esto no ha permitido que Bahía de Banderas salga de ese tremendo bache legal, en la incertidumbre de la inversión inmobiliaria y la falta servicios básicos, por lo que es importante que la ciudadanía denuncie cualquier predio irregular en el municipio para que se le brinde información y apoyo necesarios. Mencionó que, el municipio tiene un crecimiento poblacional anual, por arriba del 7% por lo que, es importante que, ante el crecimiento vayan de la mano los servicios de viviendas y de servicios básicos, por lo que, la regulación es la única vía que permitirá tener certidumbre. Por lo que insistió en que, la ciudadanía que, busque comprar algún terreno o vivienda en el municipio acuda a esta dirección y quienes han caído en fraude iniciar sus denuncias en el Ministerio Público en algún fraude, los focos rojos que tiene el municipio son precisamente en Valle de Banderas, San José del Valle, San Vicente, Mezcales y Punta de Mita.

Isrrael Torres