Profepa actúa contra traficantes de aves
Las especies protegidas de vida silvestre de la zona de Bahía de Banderas, son un valor que las autoridades promueven y custodian.
La inspectora y bióloga Lesly Solís, de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, PROFEPA, informó que hay dos elementos asignados en la zona desde Guayabitos a Punta de Mita, para atender los delitos ambientales: cambio de uso de suelo, tráfico de productos maderables y fauna silvestre, así como los operativos de venta de playa y uso de las concesiones de zonas federales.
Invitó a la población a no comprar loros, guacamayas, ni pericos mexicanos, incluso se han enterado de gente que vende cocodrilos, iguanas y orquídeas. Esto de acuerdo a la Norma 059-SEMARNAT 2010 esta prohibida su posesión, venta y captura.
En conjunto con la policía, tanto municipal, como ministerial y estatal, apoyaron con la detención de una persona en el inicio de este año, y durante el 2019 realizaron otra aprehensión por venta de pericos, mientras que la PROFEPA se hace cargo de la fauna decomisada.
Recordó que, en el Código Penal Federal, se tipifica de 1 a 9 años de cárcel, por posesión o consumo y se triplica la pena si realizan venta de estas especies.
Aclaró que a veces la mayoría de denuncias que reciben son por la comercialización de aves exóticas, como agapornis, ninfas y periquitos australianos, que no son mexicanas y fueron criadas en cautiverio, lo que no es un delito y pueden venderlas, siempre y cuando muestren la factura o legal procedencia.
Incluso invitó a la ciudadanía a no liberar estas especies, porque pueden causar un impacto negativo en las especies nativas mexicanas en peligro de extinción, al competir por alimentos y espacios o sustituirlas.