Prevención ante todo Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

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“Me llamo Mariana tengo 27 años, tengo 2 hijos una niña de 11 años y un niño de 12 años, me case a los 15 años, creí que podría escapar del maltrato que me daba mi padre, pensé que todo sería diferente, todo color de rosa como las telenovelas, me fui de mi casa con un hombre que me bajaba la luna y las estrellas, me decía que me daría lo mejor, que seguiría estudiado, pero cuando me fui con él y los primeros meses fueron de puros gritos, desacuerdos y groserías.

Después siguieron los golpes, ya no sabía que hacer me daba tanto miedo, siempre que llegaba a casa me golpeaba, me maltrataba llegaba alcohólico, me forzaba a tener relaciones decía que era solo suya y que ni un otro hombre me podía ver y si lo hacía me golpeaba  llegando a casa porque él decía que yo los provocaba por la forma de vestir, cambie todo de mi para que ya no me pegara mi forma de vestir, ya no salía a ver a mi madre, ni a mis amigas, ya no iba a la escuela me aislé de todo el mundo un día  llego borracho, me insulto verbalmente y me agredió físicamente y me volvió a forzar a tener relaciones sexuales con él, quede embarazada, después de unos días volvió a golpear perdí a mi bebe de tantos golpes que me dio en el vientre, me decía que cambiaría que lo perdonara yo le creía siempre, pero solo me doy cuenta que fui una tonta, después de unos meses quede embarazada de un niño yo lo tuve, fue embarazo riesgoso pero gracias a dios todo salió bien.

Cuando lo tuve, él decía que cambiaría por él, pero solo empeoro las cosas me pegaba más así pasó 1 año hasta que quede embarazada de nuevo, esta vez fue niña tome la decisión de operarme no quería traer más hijos a este mundo para que sufrieran, cada vez que él quería pegarles yo me metía para que no les pegara, cuando mi niña tenía 9 años el llego a casa borracho más que las otras veces no sabía qué hacer. Ya sabía lo que pasaría me golpearía más y más pero esta vez no fue así dijo que mi niña ya era todo una señorita, se fue contra ella la violo hasta que un día me harte de todo el maltrato, una vecina me ayudo, dije que ya no tendría más miedo que yo no era esclava de nadie, que tenía que salir adelante por mis 2 hijos, que no podía seguir permitiendo más violencia, porque le estaba dando un mal ejemplo a mis hijos.

Lo demande y hasta la fecha no ha salido de la cárcel ya no tengo miedo a nada, hoy ya no dependo de un hombre, no tengo miedo a nada y vivo por mis hijos gracias a ellos salí adelante.”

Testimonio de Mariana relatado en el 2013, han pasado 6 años desde este testimonio y esta historia se repite una y otra vez, son diferente víctima y victimario.

El 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer esto con la finalidad de denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres en todo el mundo y levantar la voz para exigir políticas preventivas en todos los países para su erradicación.

Las Naciones Unidas define la violencia contra la mujer como “todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada”. La violencia contra la mujer, es algo que vemos todos los días, se vuelve tan cotidiano, que pasa desapercibido en la mayoría de las ocasiones, pero debe existir cero tolerancia para este problema de salud pública.

La prevención es fundamental en estos casos, debemos concientizarnos que la violencia es algo que se puede prevenir, si educamos a nuestros hijos e hijas en igualdad, que desde pequeños aprendan que la violencia no es la respuesta que el respeto a los seres humanos es un derecho universal.

Lamentablemente Puerto Vallarta no se queda atrás, a pesar de que tenemos opciones institucionales, a pesar de que se hace mucha prevención en cuanto al tema de la violencia hacia la mujer, no es suficiente, hace falta más, ningún esfuerzo será suficiente. El maltrato es algo que afecta no solo a la mujer, sino al entorno familiar, al entorno social, incluso el maltrato continuado genera en la mujer un  proceso patológico de adaptación denominado “Síndrome de la mujer maltratada”.

El Síndrome de la mujer maltratada puede manifestarse con síntomas corporales o trastornos psicológicos. Los más frecuentes son:

  • Baja autoestima.
  • Tienen sentimientos encontrados; aunque odian ser agredidas, también piensan que se lo merecen porque se consideran la causa del problema.
  • Viven en la culpabilidad.
  • Se consideran fracasadas.
  • Padecen temor e incluso pánico ante cualquier tipo de cambio.
  • No tienen control sobre su vida.
  • Desean que haya una solución mágica para sus problemas.
  • Angustia, malhumor, depresión, sensación de impotencia, intentos de suicidio e insomnio.
  • Abuso de drogas y trastornos de la alimentación.
  • Molestias en el cuerpo como: dolor abdominal crónico, dolor de cabeza o cansancio.
  • Problemas ginecológicos.
  • Creen que no merecen ayuda ni hay quien pueda o quiera ayudarlas.

La violencia no es normal, nunca ha sido normal ni será normal nunca. Algo muy importante es no juzgar a quien es víctima de violencia, desafortunadamente están inmersas en un círculo vicioso del cual pueden salir claro, pero necesitan mucha ayuda, sobre todo de mucho amor y calma, son personas que no merecen ser juzgadas sino apoyadas. Tengamos cero tolerancia a la violencia, si eres víctima de violencia o eres testigo de estos actos, no se queden calladas o callados, actuar puede ser y hacer la diferencia.  La prevención es la mejor acción.