Prevención ante todo ¿Cuánto vale tu vida?

Si, los delitos son cosa nuestra de cada día, nos dormimos con noticias de nota roja, despertamos con más hechos de este y comemos con noticias nada agradables, un homicidio por acá, un feminicidio por allá, un asalto por otro lado, un robo con lujo de violencia en equis lugar y la lista es larga, a veces me invade la frustración y desesperación, porque por más que se busca generar un cambio social a través de la prevención en el que muchas personas, asociaciones civiles, sociedad organizada, programas gubernamentales, etc., participamos de manera activa aún así pareciera que el trabajo que se hace es nada comparado con todo lo negativo que sucede en la sociedad, aunque me queda claro que si este trabajo preventivo no se hiciera estaríamos peor (si es que esto es posible).

Hay algunos hechos que me frustran más que otros, unos de estos son los delitos en que el que la víctima es asesinada por resistirse a la comisión del delito, específicamente me refiero a los robos, por ejemplo, cuantos hechos hemos identificado donde el delincuente mata su víctima por resistirse al robo, es por esto el título de la columna, ¿cuánto vale nuestra vida? ¿cuánto puedes traer en tu cartera que vale la pena morir por ello y antes de que se pongan a renegar y decir que es el enojo, el cansancio, la frustración de la ciudadanía lo que los lleva a actuar de esa manera, si, lo comprendo perfecto, sin embargo ¿realmente nuestra vida tiene precio? en lo personal creo que no, creo que no hay dinero que valga la pena para que una persona pierda su vida solo por conservar un puñado de billetes, un celular o un carro, con esto no quiero decir que nos tengamos que resignar a que personas que no se han esforzado y no les ha costado ganarse las cosas, de la noche a la mañana vengan a querer llevarse todo, pero lo que si podemos hacer en ese momento es protegernos y evitar una pérdida mayor.

Por más frustración y enojo que puedas sentir, lo más importante en estos casos es mantener la calma, manejar un bajo perfil, seguir las indicaciones del delincuente (por más enojo que este cause) evitar mirarlo a los ojos, evitar la confrontación, esto no te hace cobarde, te hacer ser inteligente, porque estás cuidando lo más valioso… tu vida. Cuando somos víctimas de algún delito es complicado pasar por las etapas de atender, entender y asimilar, no es fácil, pro tampoco imposible, lo material lo recuperas, tu vida no, aunque, existen momentos para pelear, cuando esto sea necesario para salvar tu vida, cuando la vida de un ser querido esté en riesgo, donde el defenderte puede hacer la diferencia entre vivir o morir, ahí sí, si hemos de morir que sea por algo que valga la pena y esto no lo escribo para que crean que es mejor vivir en una sociedad sumisa donde hay que agachar la cabeza ante el delincuente no, lo que si creo es que debemos ser más listos, incrementar el riesgo del este delincuente, en criminología existen diversas teorías acerca del delito y la prevención y justo una de estas teorías resume en cinco puntos como reducir las oportunidades para que se cometa el delito:

• Incrementando el esfuerzo que el delincuente debe llevar a cabo para poder cometer un delito.
• Incrementando el riesgo que el delincuente debe enfrentar para completar un delito.
• Reduciendo los beneficios o recompensas que el delincuente aspira a obtener al completar un delito.
• Limitando las excusas que el delincuente puede emplear para “racionalizar” o justificar sus acciones.
• Reduciendo o evitando las provocaciones que pueden incitar o tentar a un delincuente a cometer actos criminales.

Como podrán notarlo son puntos muy sencillos de poder llevar a cabo y regresando al tema central, espero que puedan reflexionar acerca de lo aquí expuesto y empecemos a actuar de manera diferente, hagamos de la prevención nuestro estandarte de vida, de hecho, el 90% de los delitos pueden justo evitarse a través de la prevención, pero, para esto se necesita de la participación ciudadana y del compromiso social. Gracias por llegar hasta este punto, les deseo un excelente inicio de semana.