¿Por qué se sienten fuertes los temblores en la CDMX?

Todo es debido a que la capital del país fue construida sobre un antiguo sedimento de un lago. El tipo de suelo consiste en depósitos lacustres muy blandos y compresibles con altos contenidos de agua, lo que favorece la amplificación de las ondas sísmicas y, por ende, los temblores se perciben con más fuerza.

Los españoles construyeron la actual Ciudad de México sobre las ruinas de la capital del Imperio azteca, Tenochtitlán, que conquistaron en 1521. Esta estaba asentada sobre un islote en el lago de Texcoco, el cual fue desecado por los españoles.

En la actualidad, la mayor parte de la ciudad está sobre capas de arena y barro de una profundidad de hasta 91 metros. Estos sedimentos suaves y acuosos hacen que la ciudad sea particularmente vulnerable a los sismos y a otros problemas.

Los sedimentos sueltos cercanos a la superficie que hacen a las ondas más lentas, de 3000 metros por segundo a aproximadamente 50 metros por segundo. Entre más lenta la onda, la amplitud es mayor por lo que el movimiento es más violento. 

Esto empeora cuando el material debajo de los sedimentos sueltos son más profundos y densos, eso ocasiona que las ondas queden atrapadas en el valle, por lo que el temblor dura más.

Por si fuera poco, la Ciudad de México también está asentada en una zona propensa a los sismos debido a que está sobre la placa de Norteamérica y la placa de Cocos se desliza por debajo de ella a lo largo del suroeste del país. Y que de paso, chocan lentamente entre sí.

Cabe destacar que la colisión de una placa que se desliza debajo de la otra se denomina “subducción” el cual libera grandes cantidades de energía y justo esto hace que los sismos en México sean un fenómeno común.

No obstante, hay sucesos en particular que quedan en la memoria de los mexicanos por la mortalidad que dejaron, entre ellos está el de 1985 con magnitud de 8.1 que causó la muerte de poco más de 10,000 personas, el de 2017 de 8.2 de magnitud que cobró la vida de al menos 369 personas y derrumbando a 57 edificios tan solo en la capital. 

El más reciente fue este 10 de mayo del presente año con una magnitud de 3.0 con epicentro en la alcaldía Álvaro Obregón, el cual tuvo 13 réplicas con magnitudes entre 1.0 y 2.3 que se extendieron hasta este 11 de mayo.