La Peregrinación de Los Favorecidos recuerda el milagro de la Virgen de Guadalupe a vallartenses
Miles de vallartenses se preparan para participar este 12 de diciembre en la tradicional Peregrinación de Los Favorecidos, una manifestación de fe en la Virgen de Guadalupe, surgida tras el accidente ocurrido en Compostela, Nayarit, la mañana del 11 de junio de 1946, cuando un grupo de fieles sobrevivió gracias a lo que atribuyeron a la intervención divina.
De acuerdo con los relatos históricos, solo un hombre falleció en aquel hecho, mientras que el resto de los peregrinos logró salvarse. El grupo regresaba de la Basílica en la Ciudad de México, tras haber atendido un llamado del párroco Rafael Parra Castillo, quien convocó a los fieles de la diócesis de Tepic a visitar el santuario guadalupano.
Eran cerca de 30 vallartenses quienes viajaron en las camionetas conocidas como “Corrida Tropical”, propiedad del transportista Agapito Medina, considerado el primero en brindar este tipo de servicio en Puerto Vallarta.
Algunos de los peregrinos eran: Pascual Ruiz, Bernardo Gradilla, Trini Gómez, “Chole” Santana, un señor que le decían “El Arriero”, del cual no recordaban su nombre Alfonso y Cleta Siordia, padre e hija; Carmen Macedo, Cuca Montes, además la esposa del chofer de nombre Cipriana su hermana y cuñado de chalan el “Pleye” Araiza, Emma Bernal Torres y su madre, Elodia García Bernal; además de las hermanas Josefina y Consuelo Munguía García.
El trayecto de ida transcurrió sin contratiempos, pese a que la carretera federal 200 estaba en construcción. Tras varios días de viaje se emprendió el retorno hacia Puerto Vallarta, y en Guadalajara se sumó el recaudador de rentas Donaciano Prado, a pesar de que Agapito Medina advirtió que la unidad ya estaba llena.
Durante el trayecto, algunos pasajeros compraron bebidas en Tequila y continuaron sin novedad hasta llegar a Compostela, donde el camión quedó sin frenos al atravesar una zona de barrancas.
Según testimonios, en ese momento los viajeros se encomendaron a la Virgen de Guadalupe, y la unidad quedó atorada en un montículo de tierra, evitando la caída al vacío. Solo Donaciano Prado perdió la vida tras lanzarse de la camioneta en un intento desesperado por salvarse.
Horas después, los sobrevivientes fueron trasladados en otro vehículo y regresaron a Puerto Vallarta, donde los habitantes los recibieron entre sorpresa y alivio, pues se temía que más personas hubieran fallecido.
Aquel episodio motivó que, desde ese mismo año, los sobrevivientes organizaran la primera caminata en agradecimiento, tradición que bautizaron como “Peregrinación de los Agradecidos”, hoy conocida como la Peregrinación de Los Favorecidos, que actualmente reúne a más de 30 mil asistentes.
