Pensamientos dichos… En voz alta: ¡Paren Maquinas! A manera de despedida

Si los diarios se mueren, entonces ¿dónde van a publicar el obituario? Stephen Colbert

La noticia fue abrumadora, venia camino a Puerto Vallarta procedente de la ciudad de Guadalajara cuando recibí el mail donde se me notificaba que, la edición de este día 14 de diciembre sería la última del periódico Tribuna de la Bahía, apenas podía creerlo, la tecnología había alcanzado de manera terminal un espacio noticioso de enorme importancia para la región.
¿Qué pasaría ahora?, la muy arraigada costumbre de levantarme por las mañanas e ir a comprar el periódico también había terminado, ¿Qué hare ahora mientras espero mis desayunos?, la verdad es que algo así ya lo esperaba, solo que me era difícil entender que había llegado el momento, la tecnología, la modernidad y el tiempo hacían su trabajo.
Los cambios en la actualidad nos sorprenden, nos llenan de asombro, la tecnología nos está llevando por un mundo desconocido en el que tenemos que re aprender casi todo de nuevo, somos seres construidos para un mundo que poco a poco desaparece, vivimos en un mundo que parece desconocemos y que parece nos desconoce.
Vivimos frente el fenómeno de la digitalización de la vida cotidiana, todo lo que hacemos tiene que ver con una computadora, con una aplicación, con internet, redes sociales, vivimos atados a un sistema inteligente para poder sentirnos parte de este mundo, andamos con el miedo de aislados del uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación lo cual sería sinónimo de aislamiento social y cultural.
Estamos parados frente a frente con el transitar de las cosas del lado análogo a lado digital, lo vemos en la fotografía, en los libros y en los periódicos, y este traspaso de un lado al otro nos está costando trabajo, nos está costando adaptarnos y más aún, no está causando verlo como parte de un pasado.
La desaparición de los diarios es algo que me cuesta ver, vivir y sobre todo entender, he leído periódicos casi toda mi vida, me he fascinado con primeras planas históricas, con la sección de las caricaturas, con las noticias de los deportes, los obituarios, en los periódicos encontré los anuncios de los primeros trabajos que tuve, soñaba con un día poder aparecer en alguna de sus páginas y más aún anhelaba poder escribir en alguna de sus páginas. La tendencia de la desaparición de los diarios se vio de manera seria con el periódico más antiguo del mundo, el Lloyd’s List el cual ll 20 de diciembre de 2013, dejó de imprimirse para mudarse al mundo digital, fundado en 1734, nació como una tabla de anuncios sobre el sector naviero, este diario se colocaba de manera visible en una cafetería en el puerto de Londres, hoy el Lloyd’s List es accesible desde cualquier cibercafé o cafetería que tenga conexión a Internet. Sin duda, que el futuro de todo y de todos será digital, tanto los periódicos como las revistas y los libros tienen enfrente, grandes desafíos en un mundo digital, la red ha sido la causante de restar lectores a los rotativos y de cambiar conceptos tradicionales para nosotros, sin duda nuestro estilo de vida cambiara abruptamente, ya no necesitaremos al voceador, bastara abrir un teléfono, una tableta o una computadora para poder acceder a las noticias diarias, esto no sé si sea bueno o malo, pero sí sé que es diferente.
En fin, el caso es que la desaparición del formato impreso del diario tribuna de la bahía fue alcanzado por las nuevas tecnologías, la nostalgia de saber que el domingo 15 de diciembre no existirá más en los puestos de periódico me hace reflexionar sobre todo el significado, que algo tan cotidiano como un periódico, ha dejado para Puerto Vallarta y la región de Bahía de Banderas.
30 años fue lo que estuvo en circulación Tribuna de la Bahía, imaginen la cantidad de palabras plasmadas, de ideas, de historias, de anuncios comerciales, de fotografías, de primeras planas, imaginen cuanta historia se está quedando plasmada de sus páginas, el inventario sería imposible en este momento, pero sí creo que se debe de escribir como un homenaje a todas esas personas que han pasado por sus oficinas, por sus páginas, a todas esas ojeras que pintaron las innumerables noches de desvelo, un homenaje a todos aquellos que hicieron posible, que día a día tuviéramos en nuestras manos una edición más.
Hoy, esos 30 años comienzan a oler a nostalgia, a pasado, hoy es la última, hoy ya no habrá mañana, hoy se cierra un ciclo y todo esto sin duda que nos ocasionará una enorme confusión y lo peor es que no entendemos porque, no sabemos lo que ocurre, simplemente lo vemos ocurrir.
Tribuna de la Bahía se ha puesto frente al abismo del mundo digital y ha decidido dar el paso, las nuevas generaciones han perdido la atención y el gusto por los periódicos, tribuna de la bahía enfrento estoico una época que aún está contorneándose, externo una posición neutra ante las mutaciones políticas, tribuna de la bahía fue punta de lanza en la búsqueda de un modelo híbrido de prensa entre lo impreso y lo digital pero al final y con el fin de mantener una audiencia heterogénea y estable para así hacer frente a un mundo cada vez más competitivo y comparativo.
¡Paren prensas señores! Esta es la última edición impresa de Tribuna de la Bahía, estoy convencido de que tanto los periódicos como las revistas no han perdido su influencia social debido a las redes sociales y al internet, sino a caída impresionante en la cultura de la lectura que las nuevas generaciones tienen, en estos 30 años se quedan guardados cúmulos de historia, de datos, de información y sobre todo de reconocimiento a muchas personas que primero con máquinas de escribir mecánicas, electrónicas y después con computadoras le dieron forma a una gran aventura periodística de enorme trascendencia social, una historia que me comprometo a contar tarde que temprano como un homenaje a la gente que lo hizo posible y a quienes de momento solo puedo decirle ¡GRACIAS!, pero claro, estos son solo pensamientos dichos… en voz alta