El pan de muerto, una rica tradición que no se pierde

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Un elemento infaltable en la celebración de los Fieles Difuntos, es el pan de muerto, en Puerto Vallarta se pueden encontrar excelentes piezas para adornar los altares y degustar este 1 y 2 de noviembre. Un ejemplo es la Panadería y Repostería Leritzma, ubicada en la esquina de Revolución e Italia, en la colonia Villa de Guadalupe, que cuenta con los sabores de nuez, anís y la tradicional de naranja con azahar. 

Cabe recordar que el pan es un alimento traído de Europa; y el pan de muerto, además de ser una fusión de lo mexica y lo español, es una representación de la eucaristía, agregada por los evangelizadores españoles a las celebraciones de los mexicas entre 1530 y 1600.

Eliezer Augusto y Lázaro León, abrieron las puertas de su Panadería y Repostería, para mostrarnos cómo se elabora el exquisito pan de muertos, proceso que inicia con la masa, que lleva: huevos, harina, mantequilla, sal, leche, ralladura de naranja, azúcar y agua de azahar.

Eliezer Augusto y Lázaro León 

“La forma tradicional como la preparamos lleva ralladura de naranja y esencia de azahar, y es elaborado con mantequilla, nuestra masa es tipo brioche”, explicó mientras ponía los ingredientes en la batidora. 

Un verdadero ritual es su preparación; el amasado, reposo, colocación de sus huesitos, horneado, para concluir con la decoración de azúcar. 

Han percibido que la gente prefiere el sabor auténtico y libre de esencias artificiales. Y es variado el tamaño, pues hay quienes optan por el pan individual y hay años que se mueve más el grande o familiar. 

Eliezer Augusto y Lázaro León

“Normalmente empezamos a producir el pan de muerto un mes antes, iniciamos con poca producción, para quien guste lo vaya probando…y ya en la temporada, que son 5 o 6 días de venta, producimos unas 200 piezas diarias”

Eliezer Augusto invitó a todos a visitarlos, en la zona oriente de la demarcación El Pitillal, para que se deleiten con sus panes elaborados de manera artesanal, con ingredientes frescos y revivan esta tradición de Día de Muertos.

Miguel González Guerra