Nuestra Señora de Guadalupe: Joya de Puerto Vallarta

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La Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe en Puerto Vallarta se destaca no solo como un lugar de culto católico, sino también por su valioso aporte arquitectónico y su influencia en el ámbito artístico contemporáneo. 

El templo comenzó a tomar forma el 15 de abril de 1883, cuando el sacerdote Sabino Iruete colocó la primera piedra. Sin embargo, debido a la falta de recursos económicos, la construcción se detuvo después de la finalización de los cimientos. No fue hasta el año 1900 que se retomó la obra, y finalmente, en 1904, se concluyó la primera etapa del templo. A medida que la población de Puerto Vallarta crecía, el señor Cura Francisco Ayala redobló esfuerzos por construir un templo más grande y digno. En 1917, se terminaron los cimientos del pórtico, seguidos de los embovedados de las naves. Fue en 1939 cuando se construyó el altar y la cúpula. Finalmente, en 1963, el presbítero Rafael Parra Catillo tuvo la responsabilidad de finalizar la construcción de la torre y la emblemática corona del templo. A lo largo de las décadas, diferentes personas y circunstancias contribuyeron a la evolución de este imponente edificio religioso.

Con sus puertas abiertas todos los días, la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe ofrece servicios en inglés los sábados y misas en español e inglés los domingos, lo que refleja su diversidad y la presencia de una comunidad internacional en Puerto Vallarta.

Un legado arquitectónico: La Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe

En cuanto a su aporte arquitectónico, la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe se destaca por su estilo neoclásico, con una majestuosa corona, reminiscente de los templos europeos de estilo barroco, mientras que las torres de la iglesia reflejan la época del Renacimiento. El conjunto arquitectónico es una expresión del arte y la auténtica apariencia urbana de Puerto Vallarta, según el padre Luis Ramírez, quien se refiere a la iglesia como una expresión del arte popular.

La representación artística de Nuestra Señora de Guadalupe ha sido una parte integral de su historia y devoción. Desde la imagen original que se descubrió milagrosamente, hasta las pinturas y tapices tradicionales, la figura de la Virgen de Guadalupe se ha representado como una mujer de piel oscura, sobre una luna creciente y con ángeles a sus pies. Uno de los pintores destacados de la Virgen de Guadalupe es Baltasar de Echave, cuya obra de arte de 1606 es considerada la más antigua y firmada de la santa patrona. Además, artistas como Nicolás Enríquez han pintado copias de la imagen, siendo su obra de 1773 la más venerada en la Nueva España. En la iglesia de Puerto Vallarta, se encuentra una réplica de la imagen pintada por Ignacio Ramírez en 1945, la cual es objeto de veneración por parte de los fieles.

Corona de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe en Puerto Vallarta

12 de diciembre: Las fiestas de Nuestra Señora de Guadalupe en Puerto Vallarta

A lo largo de los años, la iglesia ha sido testigo de diversas celebraciones en honor a Nuestra Señora de Guadalupe. La festividad del 12 de diciembre incluye peregrinaciones, procesiones y la participación de bandas de mariachis y bailarines tradicionales. Los propietarios mexicanos crean santuarios en sus hogares, decorados con flores, velas y antorchas en honor a su santa patrona. Los fieles católicos se congregan en iglesias y catedrales locales antes del amanecer para cantarle a la Virgen. Además, se organizan banquetes comunitarios donde se sirven comidas tradicionales mexicanas como el atole y el pozole.

La importancia de Nuestra Señora de Guadalupe trasciende su papel en el catolicismo. Se le reconoce como un símbolo de la liberación y el poder de las mujeres mexicanas, y ha sido asociada con la teología feminista en diversas ocasiones, promoviendo la igualdad de género, la paz y la justicia en la religión. Su devoción se extiende más allá de México y ha sido celebrada por mujeres en América Latina y Estados Unidos.

La Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe en Puerto Vallarta es un lugar de culto católico con un valioso aporte arquitectónico y una influencia artística contemporánea significativa. Su historia, representación artística y celebraciones festivas hacen de esta iglesia un punto focal tanto para la comunidad local como para los visitantes, dejando una huella perdurable en la cultura y la fe de la región.

 

Danna Sabido