”El que nace para maceta no pasa del corredor”
Todas las fiestas o reuniones tienen el atractivo de tratar personas desconocidas e iniciar una posible amistad.
En la reciente fiesta del “Grito” en Palacio Nacional estuvieron los de casa y una mezcla de invitados bastante rara y alejados de nuestra vida nacional, quizá para revivir personajes ya obsoletos como la hija del Che Guevara, las hijas de Cesar Chávez, un líder respetado entre los trabajadores mexicanos en Estados Unidos, Evo Morales, sin ningún mérito para ser invitado y haber mandado un avión a Bolivia para traerlo a México, familia de Martín Luther King, distinguido líder social asesinado, familia de Julián Assange, prófugo de la justicia por haber revelado secretos de estado de los Estados Unidos.
Díaz-Canel el presidente de Cuba estaba invitado pero, misteriosamente, después de la visita de Blinken ya no se supo de él.
Como quien dice, los invitados emularon a la ensalada Nicoise, que trae de todo.
Seguramente y da gusto que los invitados se hayan ido viendo la grandeza de México, la Plaza Mayor de fiesta y la grandeza del Palacio Nacional, con sus salones y prestancia, ahora tomado por el presidente en turno como vivienda permanente.
Nos hubiera gustado aprovechar estas Fiestas Patrias e invitar a mandatarios europeos y asiáticos para fomentar las exportaciones, el turismo y las inversiones con ellos, pero a nuestro presidente en turno eso no se le da.
Una importante ocasión para ampliar nuestras relaciones comerciales con otros países, y diversificar y fortalecer nuestras exportaciones.
Ni modo, “el que nace para maceta no pasa del corredor”.