Muere el maestro Pablito López, pionero del basquetbol vallartense
Murió el pasado fin de semana el maestro Pablito López Joya, dejando gran legado en la ciudad, al ser pionero del basquetbol.
También fue telegrafista, fundador de la primera secundaria en el municipio, la ETI 49, donde se desempeñó como profesor de Educación Física hasta su jubilación hace 13 años.
El viernes 6, en la tranquilidad de su hogar, en la calle Basilio Badillo, a las 5:15 de la tarde falleció por causas naturales a los 92 años de edad, conmocionando a las familias del Viejo Vallarta.
Fue velado ahí según su voluntad; aunque por la pandemia solo se permitió acceso a su gente cercana. Afuera, desde la banqueta estuvieron varios amigos y vecinos acompañándolo en su despedida.
Pablo López nació en El Refugio Suchitán, del vecino Cabo Corrientes, pero muy niño llegó a vivir al entonces pueblo vallartense, dónde rápido destacó por su entrega al trabajo y deporte. Junto con sus hermanos Roberto, Félix y Avelino, ingresó a laborar a Telégrafos de México.
Su hijo Hugo Alberto, recuerda que lo cambiaron un tiempo a Nogales, Sonora y a Chihuahua, donde creció su afición y técnica por el basquetbol:
“Después de Nogales le ofrecieron una plaza en Chihuahua, que fue la cuna del basquetbol en México, nos contaba que en ese tiempo había jugadores que lo practicaban en Estados Unidos, entonces el nivel ahí era demasiado bueno”.
Una anécdota que solía platicarles de esa época, era:
“Se reían de él, porque aquí las pocas personas que jugaban basquetbol tiraban con dos manos, entonces allá a él le enseñaron a tirar con una, y creo fue de los legados más bonitos que tuvo, cuando regresó a Puerto Vallarta, empezó a instruir a sus alumnos con esa técnica del tiro con una mano”.
CONTRIBUYÓ EN LA CONSTRUCCIÓN DE LA PRIMERA UNIDAD DEPORTIVA
Conoció a don Alfonso Díaz Santos, el primer gran promotor de las actividades físicas en Vallarta. Juntos acudieron con el filántropo Agustín Flores Contreras, para solicitarle un lugar dónde practicar el deporte; ellos gestionaron el terreno y don Agustín pagó la barda y construcción de canchas.
En esa Unidad Deportiva, que hoy lleva el nombre de Agustín Flores Contreras, se encuentra el espacio para basquetbol y volibol, donde hace dos años le hicieron un homenaje y llamaron “Auditorio Pablo López Joya”.
“Algo que significó mucho en su vida, fue haberte hecho por parte del presidente municipal de Puerto Vallarta y algunos colaboradores, el homenaje y ponerle su nombre al auditorio, y haberlo hecho en vida fue lo máximo”, destacó.
Trajo a la memoria la etapa final de su reconocido padre:
“El como siempre, hasta el final, como siempre fue, muy recto, muy seguro de lo que quería, y él muy tranquilo nos comentaba que lo dejáramos descansar, que había vivido su vida plena, estaba contento, triste… estuvo coherente hasta el último minuto de su vida, y eso nos da a sus hijos y familiares una satisfacción”, subrayó.
Hasta el último momento, él decidió lo que quería hacer con su vida, se fue tranquilo y en paz. Su casa quedó llena de recuerdos, fotografías históricas, reconocimientos y trofeos.
Le sobreviven sus hijos Laura Estela, Héctor, Margarita y Hugo, 15 nietos y 1 bisnieta. Hace 11 años murió su hijo José Ángel y en el 2010 sufrió la partida de su amada esposa Estela Rodríguez.
Se está celebrando en su memoria un novenario de misas, a las 7:30 de la tarde, en el templo de la Santa Cruz.
