Megaoperativo Nuevo Nayarit: La Puerta al Megafraude a la Banca
Dos eventos que han marcado el gobierno de Nayarit, encabezado por Miguel Ángel Navarro Quintero, son el Megaoperativo Nuevo Nayarit y el megafraude a la banca, con un desfalco calculado en más de 4 mil millones de pesos. Según expertos, ambos hechos son simbióticos, pues uno alimentó al otro.
El tan mencionado Megaoperativo Nuevo Nayarit abrió la puerta a reformas fallidas, como la privatización del Registro Público de la Propiedad y la digitalización del registro catastral, donde se cometió el “descuido” de pasar todos los asentamientos a formato digital sin incluir acotaciones, como la presencia de gravámenes, es decir, la garantía de propiedad a cambio de un crédito inmobiliario.
Defraudadores asentados en Bahía de Banderas, ya endeudados, aprovecharon esta omisión y el borrón de sus deudas en los libros catastrales para volver a solicitar millonarios créditos en cuatro bancos distintos a los que ya estaban sujetos, desatando el mayor desfalco a la banca en la historia de Nayarit.
Navarro Quintero y sus asesores jurídicos establecieron las bases legales y argumentaron que la salida de 70 mil terrenos en Compostela y Bahía de Banderas, propiedad del Fideicomiso Bahía de Banderas (FIBBA), fue consecuencia del manejo rudimentario de los registros en papel en el Registro Público, de donde simplemente “arrancaban hojas de los libros”. Estos terrenos cayeron en manos de particulares vinculados al exgobernador Ney “N”, quienes los vendieron posteriormente, generando un desfalco de 21 mil millones de pesos.
De ahí surgió el operativo para recuperar dichos terrenos y, en paralelo, la intención de establecer candados en el Registro Público de la Propiedad. Mientras se informó sobre la recuperación de 4 mil millones de pesos en terrenos, una cifra similar corresponde al desfalco bancario.
El sector empresarial ha señalado que este desfalco bancario pudo haberse gestado desde el mismo Registro, dada la magnitud del caso y el beneficio directo a un desarrollo inmobiliario. Sin embargo, el Gobierno de Nayarit ha negado esta posibilidad, atribuyendo la responsabilidad a notarios de Jalisco y del Estado de México.
No obstante, el Megaoperativo Nuevo Nayarit ha traído consigo daños colaterales tanto para la sociedad como para la iniciativa privada, afectando el patrimonio de familias y el sistema bancario.