Manifestación en Puerto Vallarta; exigen al Hotel Sunscape abrir acceso a playa Holi
Aproximadamente un centenar de ciudadanos se manifestó la mañana de este sábado sobre el bulevar Francisco Medina Ascencio, en el cruce con la avenida Fluvial Vallarta, en plena Zona Hotelera Norte, para exigir la reapertura del viejo callejón del que fuera el hotel Holiday Inn, hoy Hyatt Sunscape, ya que también se ha bloqueado el acceso a la playa a los propietarios del edificio vecino, Condomar.
La protesta se desarrolló de forma pacífica, sin afectar a la población ni al tráfico vehicular, aunque por unos momentos un representante de la organización RCPN se infiltró e intentó agitar los ánimos, alentando a la gente a ingresar por la fuerza. Sin embargo, los organizadores y ciudadanos contuvieron la situación. Incluso, varios automovilistas que pasaban sonaron el claxon en señal de apoyo.
Vallartenses y residentes de todas las edades, incluso algunos en sillas de ruedas, se apostaron en la transitada avenida. A gritos, con trompetillas, cartulinas y lonas, expresaron su rechazo a lo que ocurre en las inmediaciones de la popular Playa Holi. Entre las pancartas se leía:
“Hoteles Hyatt Sunscape bloquearon nuestro acceso a la playa. ¡En México las playas son de todos!”; “Exigimos respeto a nuestros derechos y libre acceso a nuestro patrimonio natural”; “¡No más privatización ilegal de las playas!”; “Acceso libre y gratuito a la playa; la playa es de todos” y “No más injusticia: playa pública”
Quienes viven en los departamentos Condomar denunciaron que se les cobra por ingresar a las instalaciones y la playa, a pesar de ser propietarios. Han llegado al hartazgo, pues ahora deben portar un brazalete como si fueran turistas, ya que se les ha restringido el libre acceso. Aun cuando el hotel afirma que se trata de propiedad privada, los residentes insisten en que deben tener un paso garantizado.
Uno de los manifestantes explicó:
“Originalmente, los propietarios compraron compartiendo instalaciones con el hotel; se les vendió con acceso gratuito. Después, se les quiso cobrar 11 mil dólares al año para acceder a las instalaciones, incluida la playa. Si se pagaba a tiempo, eran 5,500 dólares anuales. Luego lo quitaron y ahora deben dejar un depósito de 2 mil dólares y pagar un ‘todo incluido’ de 100 dólares por adulto y 50 por niño aproximadamente.”
Otro ciudadano subrayó:
“Sabemos que los que viven ahí no pagan un todo incluido solo para ir a la playa. Son personas discapacitadas, de la tercera edad, nativos de Vallarta, profesores… Cuentan historias de cuando podían pasar libremente. Poco a poco fueron cerrando el paso y ahora ya definitivamente cobran 100 dólares.”
Los manifestantes caminaron hasta la calle empedrada de ingreso al hotel y a los condominios, donde encontraron la reja cerrada y un letrero de “Propiedad Privada”. El guardia de seguridad les negó el paso y llamó a sus superiores. Salió entonces el gerente general, Miguel Beltrán, quien fue recibido con gritos como “¡Vergüenza te debería dar como mexicano!” y “¡Son muy arbitrarios!”
El ejecutivo aseguró que no hay problema para permitir el acceso a propietarios y visitantes, pero los invitados deben ser reportados previamente, conforme a sus protocolos. Aclaró que la propiedad en Condomar es independiente del hotel. Sin embargo, los presentes le reprocharon no haber respondido correos ni solicitudes anteriores.
Beltrán puntualizó que se trata de una propiedad privada y que nunca ha existido un paso público por esa vía. Reconoció que no son dueños de la playa, pero argumentó que sí pueden decidir si dan acceso por esa calle.
“Habrá que demostrarlo legalmente si estamos obligados a dar el acceso. Existe un paso peatonal a 190 metros de aquí”, afirmó. Sin embargo, los manifestantes replicaron que el paso está a 850 metros y que no buscan acceder a las albercas o restaurantes, sino únicamente a la playa.
El gerente insistió:
“Es privado. Pueden pasar… pero no a la playa. Formen una comisión y entonces legalmente pueden defender lo que dicen.”
Entre las manifestantes se encontraba la señora Esperanza López, quien, visiblemente molesta, increpó al gerente y expresó su indignación:
“Somos propietarios. Llegamos y nos ponen brazalete, letreros de propiedad privada, tenemos que decir a dónde vamos. ¿Por qué? ¡Si voy a mi casa! ¡Soy dueña! Me costó trabajo comprarlo hace seis años, y en ese entonces teníamos otras condiciones. Ahora simplemente no nos dejan pasar y nos rodean de seguridad. ¡No somos delincuentes!”
El regidor del Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Christian Omar Bravo Carbajal, presidente de la comisión edilicia de Playas libres, limpias y certificadas, estuvo presente como observador. En entrevista declaró:
“Me invitaron a escuchar. Se trata del tema del libre acceso. Tendremos que analizarlo para saber si existe legalmente, y si es así, lucharemos por él. Por ahora, vengo a informarme de ambas partes y, a partir de ahí, trabajar.”
Como no se abrió la reja, los manifestantes caminaron aproximadamente un kilómetro por el parque lineal de la ribera del río Pitillal para llegar a la Playa Holi, donde constataron la existencia de infraestructura que delimita el hotel, elementos de seguridad y más letreros de propiedad privada.
Anunciaron que seguirán exigiendo la reapertura del acceso de forma legal y pública.
