¿Los de antes eran el problema?
Creímos que los gobiernos neoliberales del pasado eran los únicos causantes de todas nuestras desgracias.
Creímos que algunos grandes empresarios coludidos con algunos gobernantes eran la mafia del poder.
Creímos que los PRIANISTAS eran los corruptos responsables de la descomposición política del país.
Creímos que nosotros éramos diferentes. Que no éramos iguales.
Así, con toda nuestra rabia y rencor acumulados, fuimos a las urnas para dar un golpe de timón de la manera más pacífica y civilizada.
Y por fin, ganamos el gobierno. El pueblo al poder y poder para el pueblo.
Dijimos que gobernar era sencillo y fácil.
Y pasó un año; y se pasaron dos; y nos dieron los tres y aquí seguimos. En el mismo lugar y con la misma gente.
Morena parece ser una gran maquinaria de reciclados.
Los políticos, como las canastillas de la rueda de la fortuna; a veces están por el suelo y a veces están por las nubes.
Políticos que ni se crean ni se destruyen; sólo se transforman en esta Cuarta Transformación.
Los que creímos y creemos en el cambio, estamos confundidos; desorientados y desahuciados; porque apostamos todo nuestro resto.
El país prometido, parece paraíso perdido.
Pero la esperanza muere al último.
¿Usted todavía tiene esperanza?
Lo dejamos para el fin.