Julio César Chávez revela que su hijo fue presionado por el Cártel de Sinaloa para golpear a una persona

Foto: captura
El legendario boxeador Julio César Chávez reveló que su hijo, Julio César Chávez Jr., fue presionado por miembros del Cártel de Sinaloa para golpear a una persona, asegurando que lo hizo por miedo a ser asesinado y no por estar involucrado en actividades delictivas.
Durante una entrevista con Adela Micha para su canal La Saga, publicada el 5 de noviembre, el expugilista habló abiertamente sobre las acusaciones en contra de su hijo y aclaró que la situación ocurrió bajo amenazas directas.
“El incidente no fue porque él quisiera, fue por miedo. Si no vas, te llevan. ¿Qué quieres? ¿Que te maten? Prefiero ser amigo de ellos a que me maten los cabrones”, declaró Chávez durante la conversación.
“Le pegó un ganchito despacio”
El excampeón relató que la exigencia provino presuntamente de “Los Chapitos”, grupo encabezado por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, quienes habrían ordenado a su hijo golpear a un hombre como castigo.
“Le dijeron: ‘Si le pegas unos chingazos, le perdonamos la vida’. Mi hijo no quería. Dijo: ‘Le voy a pegar uno nomás, pero ya le perdonan la vida’. Y le pegó un ganchito así, despacio”, narró el boxeador.
De acuerdo con Chávez, su hijo no actuó por voluntad propia, sino por temor a las represalias. Además, aseguró que esa ocasión “tenía dos días amanecido y andaba muy mal”, y que tras la agresión “solo trató de evitar algo peor”.
“Eran rateros o no sé quiénes eran… Se estaban divirtiendo… y de ahí sacan que mi hijo era golpeador”, dijo el excampeón.
“No es delincuente, solo tuvo miedo”
Julio César Chávez rechazó categóricamente que su hijo tenga algún vínculo con el narcotráfico, al asegurar que el episodio fue un acto de supervivencia.
“Amigo no quiere decir que estés dedicado a lo mismo. Al contrario, le salvó la vida por el chingacito que le pegó, pero todo se maneja de manera diferente”, comentó.
También reconoció que en ciudades como Culiacán, Sinaloa, es inevitable convivir con personas relacionadas al crimen organizado, pero insistió en que eso no lo convierte ni a él ni a su familia en delincuentes.
“Todos los conocen en Culiacán. Es amigo mío, he convivido con ellos. ¿Eso me hace narcotraficante?”, cuestionó.
Finalmente, fue contundente al asegurar que si alguno de sus hijos estuviera involucrado en delitos, él mismo lo entregaría a las autoridades.
“Si yo supiera que mi hijo fuera delincuente, yo mismo lo meto al bote”, afirmó.
Habla sobre Omar Chávez y las adicciones
Durante la misma entrevista, el excampeón también habló sobre su hijo Omar Chávez, quien actualmente se encuentra internado en su clínica de rehabilitación Baja del Sol, tras una recaída.
“Tenía un mes muy bien, entrenando en Culiacán, pero llegó a Tijuana y recayó. Es obsesivo y compulsivo para el juego. Lo tengo en la clínica; ya tiene dos semanas ahí”, contó.
Chávez dijo que no siente vergüenza en reconocer públicamente las batallas de sus hijos contra las adicciones, pues su objetivo es ayudarlos a salir adelante, como él lo hizo hace años.
Antecedentes judiciales de Julio César Chávez Jr.
De acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR), sobre Julio César Chávez Jr. pesa una orden de aprehensión emitida en enero de 2023 por delincuencia organizada y tráfico de armas, municiones y explosivos.
El pasado 18 de agosto de 2025, un juez le dictó prisión preventiva, luego de que la investigación lo relacionara con una red de tráfico de armamento.
El caso también es seguido por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos, que en junio de 2025 lo clasificó como “una amenaza grave para la seguridad pública” por presuntos nexos con integrantes del Cártel de Sinaloa.
Actualmente, el boxeador se encuentra bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), en espera de resolución sobre su posible deportación a México.




