Vecinos de Aralias hartos que SEAPAL destruyera su calle

0
166

Vecinos de la colonia Aralias se encuentran sumamente molestos porque hace tres meses, el Sistema de Agua Potable, Drenaje y Alcantarillado, SEAPAL Vallarta, abrió la calle Pavo Real, de Las Torres hasta la avenida Francisco Villa, para renovar la tubería de la red hidráulica, pero no han repuesto el adoquín, solo rellenaron con tierra, provocando polvo, lodo, baches y caos vehicular.

Numerosas quejas han llegado a Denuncias Ciudadanas CPS Noticias-Tribuna de la Bahía, entre ellas la de la señora María Elena De la Cerda, quien vive en el fraccionamiento desde hace 30 años y dijo nunca habían tenido este tipo de problemas.

“Después de que abrieron echaron tierra, luego se hizo un polvaderon con los carros, luego llovió y se llevó esa tierra, pero después volvieron a echar tierra y de nuevo se la llevó el agua, mientras no llueve las casas se atascan de polvo por dentro y por fuera, no sé por qué no arreglan esta calle, mira en todas las esquinas hay arena, hay tarimas con adoquín, ahorita anda la máquina allá, vienen un día no se que hacen, se van y tardan días en regresar, no sé qué están esperando que no terminan”, señaló desesperada. 

Los pobladores del rumbo se encuentran preocupados por el atraso de los trabajos, por lo que hacen un llamado a las autoridades para que concluyan y la circulación e infraestructura vuelva a la normalidad. 

Señalaron que el problema es que no se tiene un fecha para que la obra concluya, es decir cierren la calle, la adoquinen y se hagan pruebas hidráulicas, advirtiendo que de seguir así, se va a dañar más esta vialidad.

“Que por favor pusieran atención, que ya termine este cochinero que es un desastre, nunca en mis treinta años de vivir en esta colonia habíamos padecido esto”

Y es que el personal del organismo operador del agua trabaja por segmentos, dejando un carril abierto, pero en ciertas horas del día entorpecen la circulación y se crea un caos, aunado a la falta de cultura vial y la nula planeación de vías alternas y avisos oportunos del cierre a la circulación en calles. 

“Abren hoyos, los dejan, vuelven abren más y se van, y a los cuatro o cinco días dan otra vuelta, ¿qué andan haciendo que no acaban?”, cuestionó la vecina.

Miguel González Guerra