“Hablar con pleno conocimiento de la verdad”

Después de los actos violentos en Cd. Juárez, Guanajuato, Guadalajara y las ciudades de Tijuana, Mexicali, Ensenada y Rosarito sorprendieron las declaraciones del presidente en turno, diciendo que era una acción orquestada por sus adversarios.

De la misma manera la sociedad pensante y verdadero soporte del país, pensaría de la misma manera y suponiendo que fue organizada por el mismo gobierno para imponer la integración de la guardia nacional al ejército, por quemar los Oxxos, que tanto los odia.

En todos estos actos violentos se vio la ineficiencia de la Guardia Nacional.

Ambas ideas no dejan de ser meras suspicacias por ambos lados sin ninguna base real.

Lo que sí es una realidad es que el presidente en turno vive rodeado de serviles temerosos que no le dicen la verdad y por otro lado, vive en una burbuja alejado de la realidad, en su palacio donde todo es seguridad, y cuando sale no tiene ningún contacto con la realidad únicamente rodeado de sus guaruras a entrevistarse focas aplaudidoras acarreadas, dentro de la máxima seguridad.

Vive en una soledad real.

Teniendo esa forma de vivir, sin que nadie de sus colaboradores le diga la verdad por temor a que se moleste, es la razón por la cual dice que “son exageraciones”, “notas periodísticas de conservadores” y otras tantas aseveraciones absurdas producto de su supina ignorancia de la realidad.

Quisiera que estuviera de frente a esos vándalos, producto de “abrazos no balazos”, viendo que la vida de su familia y la suya dependiera de un tipejo de esos, y ver si seguiría haciendo las declaraciones que ha hecho, ofensivas y basadas en una completa insensibilidad hacia su “pueblo bueno y sabio”, sufrido, temeroso y el más dañado por estas acciones.

Le recomiendo se disfrace un día y salga a la calle como cualquier hijo de vecino, y palpe las opiniones que tienen de Ud. y su gobierno, el temor hacia la violencia existente para que pueda opinar con conocimiento de causa.

Esta recomendación es para no crear confusión con declaraciones fuera de lugar y poder

“hablar con pleno conocimiento de la verdad”.