Guanajuato rechaza la despenalización del aborto
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En un giro que desafía la tendencia nacional, el Congreso del estado de Guanajuato votó en contra de la despenalización del aborto este jueves, con 19 votos en contra y 17 a favor. La iniciativa buscaba alinear al estado con los avances legales en materia de derechos reproductivos que ya se han consolidado en 19 entidades del país.
La propuesta fue rechazada por mayoría simple, después de haber empatado en una votación anterior. Esta vez, una legisladora del Partido Verde cambió su postura, inclinando la balanza hacia el rechazo. Guanajuato, gobernado por el conservador Partido Acción Nacional (PAN), reafirma así su perfil tradicional en temas de derechos sexuales y reproductivos.
Panorama nacional avanza, pero Guanajuato retrocede
La despenalización del aborto ha sido adoptada en 19 de los 32 estados del país, respaldada por un fallo de la Suprema Corte en 2021 que declaró inconstitucionales las leyes que criminalizan el procedimiento. Ciudad de México fue la primera en legalizarlo hasta las 12 semanas de gestación.
Sin embargo, en Guanajuato, activistas como Verónica Cruz, directora de la organización Las Libres, aseguran que existe una “despenalización social” del aborto, ya que muchas mujeres acceden a este servicio incluso en hospitales públicos, aunque no esté legalmente permitido.
Cruz señaló que, más allá del marco jurídico, muchas mujeres encuentran alternativas seguras con medicamentos y acompañamiento de organizaciones civiles como Las Libres, que además han extendido su labor a mujeres de Estados Unidos, donde el aborto también enfrenta restricciones.
El Congreso estatal está integrado en su mayoría por legisladores del PAN, partido que ha mantenido el control del estado por más de tres décadas. Este dominio político ha influido directamente en la persistencia de normas restrictivas sobre derechos reproductivos.
La votación ha provocado reacciones encontradas. Mientras sectores conservadores aplauden la decisión, agrupaciones feministas y defensoras de los derechos humanos la consideran un retroceso frente a la lucha nacional por la autonomía de las mujeres.
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A nivel federal, la lucha por la despenalización del aborto continúa como una de las demandas prioritarias del movimiento feminista en México. Aunque los avances legales son significativos, la realidad en estados como Guanajuato refleja la resistencia aún presente en sectores conservadores.
Organizaciones civiles reiteraron que, pese al revés legislativo, continuarán brindando información y apoyo a las mujeres que necesiten interrumpir su embarazo de forma segura y acompañada.
