Aún y cuando ya se levantó la alerta sanitaria por la pandemia del COVID-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha lanzado una advertencia a la humanidad de estar preparados para poder enfrentar una nueva pandemia, de la cual, se desconoce cuál sería el origen.

“La amenaza de que surja otra variante que provoque nuevas oleadas de enfermedades y muertes permanezcan, y la amenaza de que surja otro patógeno con un potencial aún más letal”, señaló Tedros Adhanom Ghebreyesus al entregar un informe de las acciones de la OMS en la edición 76 de la Asamblea Mundial de Salud.

La máxima autoridad en salud a nivel mundial, consideró que en un futuro cercano puede haber pandemias más severas que el COVID-19, versión que ha causado alerta, sobre todo en la comunidad sanitaria de los países, ya que se debe recordar que con la pasada pandemia se colapsaron hospitales y centros médicos de naciones del mundo.

Lo anterior lo explicó Ghebreyesus tras haber declarado el fin de la emergencia sanitaria mundial por cuenta del Sars-CoV-2 que provocó más de 20 millones de muertes, según sus cálculos.

Tedros advirtió de que el final del covid como emergencia internacional “no es su final como amenaza para la salud”, y afirmó que sigue habiendo riesgo de que evolucione a variantes que generen nuevas olas de contagios y fallecimientos.

¿De dónde vendría la otra pandemia?

Para los científicos, uno de los principales virus que podrían causar la próxima pandemia es el ébola, un virus altamente contagioso que se dio a conocer sobre su existencia en África desde 1976, pero, en los últimos años, ha tomado mayor relevancia por su mutación. Se ha hecho más agresivo.

Según informes científicos, el virus del ébola ocasiona sangrado agudo, falla orgánica y hasta la muerte. Los humanos pueden contagiar el virus a otros humanos mediante el contacto con fluidos corporales como la sangre, aunque también se puede contraer por animales portadores del virus.

Los principales síntomas de esta, considerada enfermedad rara, consisten en fiebre, dolor de cabeza, dolor de garganta, muscular, diarrea, vómitos, así como hemorragias internas del cuerpo y externa que pueden terminar fatalmente con la muerte de quien se contagia.

Desde su descubrimiento en 1976, han ocurrido varios brotes de ébola en África, siendo el más reciente en 2021 en Guinea y la República Democrática del Congo.

En tanto, otra enfermedad que pondría en aprietos a los países es el virus Nipah, un virus que es transmisible de animales a humanos por lo que se le considera “virus zoonótico”, principalmente de murciélagos frugívoros a través del consumo humano de productos previamente contaminados.

El virus Nipah puede provocar síntomas graves, como fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular y de garganta, vómitos, diarrea, así como encefalitis, un trastorno inflamatorio del cerebro que puede ser fatal.

El virus Nipah ha causado varios brotes en Asia desde su descubrimiento en 1999, y la Organización Mundial de la Salud lo ha incluido en su lista de enfermedades prioritarias en términos de investigación y desarrollo de vacunas.

Un virus que ha estado en el centro de atención en los últimos años es el virus del Zika. El virus del Zika es un virus transmitido por mosquitos que se ha expandido rápidamente en América Latina y el Caribe.

El virus del Zika puede provocar síntomas leves, como fiebre, dolor muscular y de cabeza, y erupción cutánea, pero también puede causar graves defectos congénitos en los fetos de mujeres infectadas durante el embarazo.

A pesar de que la mayoría de los casos de Zika han sido reportados en América Latina y el Caribe, el virus del Zika ha sido detectado en otros países y podría dar lugar a futuras pandemias.