Fiscal Anticorrupción advierte sobre riesgos de solicitar dádivas

El Fiscal Anticorrupción del Estado de Jalisco, Gerardo de la Cruz Tovar, enfatizó la importancia de la integridad y la ética en el servicio público, especialmente ante las limitaciones salariales. Durante una serie de capacitaciones dirigidas a estudiantes universitarios y servidores públicos en Puerto Vallarta y Cabo Corrientes, el fiscal subrayó que la falta de recursos no justifica la corrupción.

De la Cruz Tovar reconoció las carencias presupuestales y organizacionales que enfrentan algunas dependencias, pero insistió en que los servidores públicos deben cumplir con su deber de manera legal y ética. 

“Entiendo que todos los servidores públicos necesitan mejores salarios, pero también hay una situación, tenemos que hacer las cosas con compromiso”, afirmó.

El fiscal anticorrupción sugirió que si un servidor público considera que su salario no es suficiente y esto lo lleva a contemplar actos de corrupción, la mejor opción es renunciar.

“Si a mí no me conviene lo que gano y eso me hace recurrir a la corrupción, entonces es mejor renunciar”, recomendó.

De la Cruz Tovar señaló que la corrupción tiene sus raíces en la codicia, pero aclaró que buscar tener más no es intrínsecamente malo.

“El problema es cuando esa gente que tiene esa facultad decide tener más haciendo cosas indebidas metiéndose en temas de corrupción”, explicó.

El fiscal anticorrupción instó a los participantes a mantener la integridad en todas sus actividades, tanto profesionales como personales. 

“El factor de movilidad social para nosotros debe ser el estudio y el trabajo, en la medida en que estudiemos, nos preparemos y trabajemos podremos tener más”, enfatizó.

Durante las capacitaciones, De la Cruz Tovar presentó ejemplos de delitos de corrupción y propuso estrategias para combatirlos, invitando a estudiantes y funcionarios a ser parte de la solución.

El fiscal concluyó su intervención con un llamado a la acción, recordando que la lucha contra la corrupción es responsabilidad de todos y que la ética debe ser el pilar fundamental del servicio público.