A dos años del feminicidio de Paola Franco que sacudió San Pancho: Expeleador de MMA sigue sin sentencia
Este 2025 se cumplen dos años desde que el pintoresco y turístico pueblo de San Pancho, en Bahía de Banderas, acaparó la atención mundial, no por sus atractivos, sino por el violento feminicidio de Paola Franco Estrada, de 46 años, originaria de la Ciudad de México.
El responsable fue Philip “N”, un expeleador neoyorquino de artes marciales mixtas, kickboxing y boxeo, actualmente recluido en el penal de máxima seguridad de Tepic, Nayarit.
El crimen ocurrió la tarde-noche del 1 de enero de 2023, tras una discusión originada por una confesión de Paola, presuntamente sobre una infidelidad.
En medio de copas y consumo de marihuana, la revelación desató la furia de Philip “N”, con quien sostenía una relación sentimental.
En un ataque de celos, Philip “N” golpeó brutalmente a Paola en el baño de la habitación #3 del Hotel Jardín, ubicado sobre la calle Asia en San Pancho.
Luego de obligarla a bañarse, la arrojó violentamente a la ducha y la agredió con los puños en todo el cuerpo. Más tarde, la trasladó a la cama, donde murió al caer la noche debido a las lesiones.
Elementos de la Policía Estatal Turística de Nayarit encontraron a Philip en la Avenida Tercer Cielo, acceso principal al pueblo. Él mismo solicitó ayuda médica para su pareja y los condujo a la habitación, donde confesó lo ocurrido tras encontrarla sin vida.
Según su relato, había salido a comprar cigarros y cerveza.
Fue detenido de inmediato y trasladado a los separos en Valle de Banderas, aún con rastros de sangre en las manos. Días después, fue llevado a Tepic al girarse una orden de aprehensión. Un juez lo vinculó a proceso al ciudadano estadunidense por feminicidio agravado, dictándole prisión preventiva por seis meses mientras se realizaba la investigación complementaria.
A pesar de que han transcurrido dos años, la Fiscalía de Nayarit no ha logrado obtener una sentencia.
Los familiares de Paola, en México y España, denuncian que las autoridades no han cumplido con garantizar una justicia pronta y expedita. Con una confesión del agresor en el expediente, temen que el caso quede en el olvido.
JB