Fallece en Torreón Carlos Gurrola “Papayita”, trabajador de limpieza víctima de acoso laboral

El caso de Carlos Gurrola Arguijo, conocido como “Papayita”, ha conmocionado al pueblo mexicano. El trabajador de limpieza, de 47 años, perdió la vida el pasado 18 de septiembre de 2025 en Torreón, Coahuila.

Después de semanas hospitalizado por graves lesiones internas causadas tras ingerir una bebida contaminada con una sustancia química.

Gurrola se desempeñaba en el supermercado HEB Senderos, aunque su contratación formal correspondía a la empresa de limpieza Multiservicios Rocasa S.A. de C.V..

De acuerdo con la denuncia de sus familiares y reportes de prensa, el hombre era víctima de acoso y hostigamiento laboral constante, disfrazado de “bromas”, por parte de sus compañeros de trabajo.

Entre los actos reportados se incluyen esconderle la comida, robarle su celular y hasta pincharle las llantas de su bicicleta.

El 30 de agosto de 2025, tras regresar de su almuerzo, Carlos bebió de su botella de electrolitos y notó un sabor extraño. Poco después descubrió que el envase contenía desengrasante, un químico altamente tóxico que le provocó quemaduras internas, daños en la tráquea y los pulmones.

Esto derivó en una larga hospitalización en clínicas del IMSS y otros centros médicos. Donde pese a los esfuerzos médicos, no logró recuperarse.

Empresas bajo la lupa

Su familia presentó una denuncia penal el 5 de septiembre de 2025 ante la Fiscalía General del Estado de Coahuila, Región Laguna, que abrió una carpeta de investigación para esclarecer lo ocurrido.

Hasta ahora, no se ha confirmado si la contaminación de la bebida fue intencional o resultado de negligencia. Tampoco hay detenidos, aunque se han solicitado grabaciones de cámaras de seguridad y entrevistas a empleados.

Familiares y allegados señalan a ambas empresas como responsables, aseguran que la empresa Multiservicios Rocasa no actuó ante las alertas de acoso laboral.

Señalan también la falta de medidas preventivas en HEB Senderos para evitar el hostigamiento por parte de sus compañeros de trabajo.

En respuesta, la cadena comercial argumentó que Gurrola no era su trabajador directo, aunque especialistas subrayan que esto no la exime de posibles responsabilidades de supervisión y seguridad.

El caso ha generado indignación pública por lo que representa, un ejemplo extremo de cómo el acoso o bullying laboral puede escalar hasta consecuencias fatales si no se atiende oportunamente.

En redes sociales, ciudadanos se han sumado a la exigencia de justicia, incluso mediante la página de Facebook “Justicia para Carlos Gurrola Arguijo”.

La familia pide que se identifique y castigue a los responsables, y que tanto la empresa contratista como la cadena de supermercados respondan por la omisión de protocolos que pudieron prevenir la tragedia.

Mientras tanto, la sociedad mantiene la exigencia de que este caso no quede impune y sirva de precedente frente al acoso laboral en México.