Esconde la cabeza el nuevo director de Seapal

Jorge Alberto Castillo Nuñez tomó protesta como director del Sistema de Agua Potable, Drenaje y Alcantarillado (Seapal Vallarta) el 26 de octubre tras el asesinato de Salvador Llamas y desde entonces no ha cumplido con la rendición de cuentas de la entrega y recepción y además de que ha escondido la cara a los medios de comunicación que le solicitan entrevistas.

Jorge Alberto llega por recomendación a la subdirección de Tránsito Municipal, pues fue compañero de clases en la Escuela Secundaria Técnica Número 3 de Luis Michel López, uno de los hijos mayores del alcalde Luis Michel.

En su toma de protesta, el presidente municipal Luis Michel y el mismo Castillo Nuñez aseguraron que serían transparentes en el tema de la entrega y recepción para que la ciudadanía conociera las condiciones económicas y de equipamiento en que se dejó a la institución, pues desde que inició la actual administración los problemas de falta de agua en las colonias han sido palpables.

“Primero se va a revisar el proceso de entrega y recepción y se va a hacer un diagnóstico de todas las áreas de cómo están trabajando y posteriormente evaluación personalizada de cada dirección y después de cada jefatura para tomar una decisión”, mencionó Jorge Castillo ese 26 de octubre, sin que hasta el momento todos los movimientos se hayan transparentado.

El pasado 07 de diciembre CPS Noticias y Tribuna de la Bahía evidenció el caso de una aviadora de Seapal Vallarta, Xiadani Zepeda Gayol, quien a pesar de la denuncia pública continúa sin trabajar y solo acude a sentarse en los sillones cercanos a la Dirección general. Antes era protegida de Salvador Llamas y ahora la acogió Jorge Castillo Nuñez por órdenes uno de los hijos del alcalde.

El funcionario municipal se comprometió a dar una entrevista el 09 de diciembre sobre el tema, pero jamás estuvo en su oficina, en repetidas ocasiones se le buscó y el director de Comunicación Social Erick González tampoco ha dado respuesta a las solicitudes de entrevista, simplemente, no quiere dar la cara a pesar de que el organismo descentralizado se maneja con recursos públicos y debe brindar cuentas claras.