En Vallarta María Espinoza sueña con sus cuartas olimpiadas
Puerto Vallarta.- Una verdadera gloria del deporte mexicano es la sinaloense María del Rosario Espinoza, a sus 32 años ha subido a los más importantes podios, siendo campeona de justas centroamericanas, panamericanas, mundiales y la máxima medallista olímpica que ha dado el país: oro en Pekin 2008, plata en Londres 2012 y bronce en Rio de Janeiro 2016, estuvo en Puerto Vallarta del 6 al 9 de febrero, participando en el abierto internacional “México Open Championships de taekwondo 2020”, como parte de su camino rumbo a los próximos Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Ponderó sigue vivo el sueño de ir por sus cuartos Juegos Olímpicos, para lo cual tiene que pasar un proceso de evaluación en México, y en marzo en el clasificatorio continental que se celebrará en Costa Rica.
En el Centro Internacional de Convenciones de Puerto Vallarta, durante su competencia, receso y participación en el presídium, observamos como era reconocida y ovacionada, sin perder la sencillez saludaba, daba autógrafos y se tomaba fotografías con el público y compañeros deportistas.
Había venido antes a unas vacaciones exprés, y dijo en verdad le gustó este destino turístico, ahora dijo vino con un poco mas de tiempo para conocer mas la ciudad y sus atractivos.
Señaló que su objetivo en este evento fue el ritmo combate, hacerlo con jueces y público, esto en lo personal le permitirá afinar detalles, pues aún no sabía si podrían sumar puntos aquí, pues de acuerdo al reglamento era incierto si cubrían el mínimo número de países que participaron en su categoría y modalidad.
Es un ejemplo a seguir, y a las nuevas generaciones recomendó no practicar solamente un deporte, cuando era niña recordó ella hizo varios deportes y encontrar después el que más les apasione seguir ese sueño, que puede ser pequeño o uno muy grande. Y en ello subrayó deben invertir dedicación, ganas, lo que ha sido su motor todos los días. Por sus éxitos sabe es la rival a vencer, lo que ha tomado como un reto, pues le gusta esa presión, pues le exige dar más y esos retos la mantienen viva dentro del Taekwondo. Con una sonrisa al final dijo espera volver pronto a Puerto Vallarta.