En lluvias… ¡filtraciones!

Ya está de más aclarar puntos porque la verdad ha caído por su propio peso.

A partir de este lunes 13 de julio el Ayuntamiento entró en un receso que se prolongará por dos semanas. No son vacaciones, pues las dependencias se mantendrán abiertas bajo esquema de guardia, pero de facto se han detenido las funciones normales de la administración pública. 

El viernes pasado dimos a conocer un audio en el que el alcalde se dirigía a su equipo más cercano para informarles su decisión de cerrar el ayuntamiento por dos semanas.

La palabra “cerrar” no la estoy inventado, la dijo el primer edil a sus subordinados, aunque de inmediato ordena que deberán de dejarse guardias en las oficinas administrativas y que los servicios operativos seguirán funcionando a excepción de aquellos empleados “que se sientan mal”.

Les dice el alcalde que ello obedece a que se han incrementado los casos de covid entre el personal y que con eso esperaba detener los contagios.

Quisieron hacer creer que la grabación era vieja y sacada de contexto, pero la construcción del discurso del presidente municipal dejaba muy claro que se trataba de una instrucción reciente. 

En Tribuna de la Bahía hay una larga costumbre de verificar la información y publicar como noticia solo aquello que haya sido verificado.

Creemos que la veracidad de nuestras noticias es elemento imprescindible. No especulamos ni apostamos por la desinformación. 

Nuestra labor consiste en recibir datos, encontrar detalles que pretenden aparecer escondidos y adelantarnos a la información. Somos un mensajero y en ese contexto solo transmitimos lo que otros generan como información, por tanto el mensajero no es el culpable. 

La decisión de parar una buena parte de las actividades administrativas del gobierno es necesaria toda vez que, a decir del alcalde, existen empleados municipales “ya con covid confirmado”.

Pero fue de tal tamaño la molestia por la filtración del audio que se pretendió desechar la decisión. Ello devino en preocupación de algunos funcionarios que advirtieron que recular podría tener un impacto en la salud del personal del municipio.

Finalmente privó la cordura y se estableció la restricción. Qué bueno..

Tampoco hay de que asustarse. Antes, la alcadía de Bahía de Banderas había tenido que cerrar por un brote de covid; en Cabo Corrientes pasó lo mismo. Más allá de nuestras fronteras estatales otros casos se han dado, como en el caso de La Paz donde está cerrado el edificio de la alcaldía y el Congreso del Estado. La molestia es, por tanto, la filtración y ahí, nosotros no tenemos responsabilidad.

Es época de lluvias, hay que tener cuidado con las filtraciones.