El Grinch, un clásico de la Navidad: este fue el entrenamiento extremo que Jim Carrey necesitó

Foto: especial
Jim Carrey ha revelado que interpretar a El Grinch en la película dirigida por Ron Howard en el año 2000 fue una de las experiencias más extremas de su carrera, debido al extenuante proceso de maquillaje y uso de prostéticos al que fue sometido durante el rodaje.
Durante una entrevista en el programa británico The Graham Norton Show, el actor comparó la experiencia con “estar enterrado vivo”, al explicar que las sesiones de caracterización podían extenderse por más de ocho horas diarias.

Estuvo a punto de abandonar la película
Carrey relató que, tras el primer día de maquillaje, regresó a su tráiler y le dijo directamente a Ron Howard que no podía continuar con la película. La situación generó preocupación en la producción, ya que la permanencia del actor era clave para concluir el proyecto.
Aunque El Grinch terminó convirtiéndose en un clásico navideño y recaudó más de 345 millones de dólares en taquilla a nivel mundial, el proceso detrás de cámaras estuvo marcado por un alto desgaste físico y mental.
Han pasado más de dos décadas y nadie ha logrado superar al Grinch de Jim Carrey.
No es nostalgia.
Hay razones reales por las que sigue siendo la mejor película de Navidad… y cuando las descubras, entenderás por qué ninguna otra ha podido igualarla. pic.twitter.com/1wAQzVW277
— Ely (@Ely_Sstark) December 6, 2025
El entrenamiento extremo que lo ayudó a resistir
Según explicó el propio actor, fue el productor Brian Grazer quien intervino para evitar su salida y propuso una solución inusual: contratar a un especialista entrenado para enseñar a operativos de la CIA a resistir tortura, con el fin de ayudarlo a soportar el estrés extremo provocado por el maquillaje.
El entrenamiento se centró en técnicas de control mental, distracción y manejo del pánico, lo que permitió a Carrey continuar con el rodaje, aunque reconoció que la experiencia siguió siendo difícil durante las cerca de 100 sesiones de maquillaje que realizó.
Bee Gees, el apoyo inesperado
Además del entrenamiento psicológico, Jim Carrey confesó que la música fue fundamental para sobrellevar el proceso. En particular, destacó que escuchar a los Bee Gees fue lo que finalmente lo ayudó a mantenerse firme durante las jornadas más complicadas.
Un clásico nacido del sacrificio
Lo que estuvo a punto de convertirse en una renuncia terminó dando origen a uno de los personajes más recordados del cine navideño. Para el público, El Grinch es una historia entrañable; para Jim Carrey, quedó marcada como una de las pruebas más duras de toda su carrera en Hollywood.




