Ejido El Coapinole y su tierra donde creció Puerto Vallarta; celebra 88 años
El 5 de septiembre es una fecha importante en la historia regional. Incluso, una calle a la entrada de la delegación municipal de El Pitillal lleva ese nombre para conmemorar que, en 1937, se fundó el Ejido El Coapinole. Sobre sus parcelas se extendió al norte Puerto Vallarta.
Este viernes, sus descendientes y autoridades celebraron el 88 aniversario de su creación. El festejo inició afuera de su salón de reuniones y oficinas, en la esquina de las calles Emiliano Zapata y 5 de Septiembre, las cuales fueron adornadas con banderas y alegorías tricolores. A las 6:30 de la mañana comenzó la serenata con la banda Perla Negra, mientras se ofreció café y pan a los madrugadores.
A las 7:00 de la mañana llegaron la mayoría de sus 125 integrantes y algunos familiares para la ceremonia cívica, con honores e izamiento de bandera, en la que se recordó la creación de este núcleo agrario que ha sido pilar en el crecimiento de la delegación municipal de El Pitillal.
El festejo fue encabezado por la mesa directiva: Rafael Rodríguez Pérez, presidente; Carlos Francisco Rodríguez Aguirre, secretario; Guadalupe Francisco Franco Machain, tesorero; y Edith Villaseñor Ulloa, consejo de vigilancia.
Como invitados de honor estuvieron sus hermanos del Ejido Puerto Vallarta: Adolfo Cueto Ramos, acompañado por su asesor Esteban García Aréchiga y Chuyita García; así como el delegado municipal de El Pitillal, Arnulfo Esparza Muñoz, quien también es ejidatario de El Coapinole.
Se recordó al primer presidente del comisariado, Ascensión Villaseñor Pelayo. El ejido fue dotado con 1,514 hectáreas de temporal, agostadero laboral y cerril, además de áreas para población. En la ampliación de 1938 se le sumaron 744 hectáreas. En 1965 perdió 107 hectáreas en unos lotes que formaban parte del estero El Salado y, en 1966, le expropiaron 27 hectáreas para la Posta Agropecuaria.
Sobre sus tierras creció El Pitillal, con más de 50 colonias nuevas. Finalmente, en 1990, la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra (CORETT) le expropió 214 hectáreas para escriturar cientos de solares donde numerosas familias ya habían construido sus hogares, convirtiendo esta zona en la de mayor desarrollo de la ciudad.
Aún cuentan con alrededor de 15 parcelas en régimen ejidal y 452 hectáreas de uso común en el cerro que se mantienen protegidas. Sin embargo, siguen administrando alrededor de 7 mil solares urbanos y están regularizando terrenos en varias colonias.
El programa de aniversario continuó con una marcha rumbo a la plaza principal del pueblo, seguidos por la banda musical. Ahí también se izó el lábaro patrio y, después, los asistentes acudieron al templo de San Miguel Arcángel, donde el sacerdote Javier Santiago Dueñas ofició una misa de acción de gracias y dirigió un mensaje de reconocimiento, exhortándolos a mantener ese ejemplo de unidad.
Tras la ceremonia religiosa, regresaron al salón ejidal para convivir y degustar sabroso menudo, machaca y carne con chile, en un ambiente de compañerismo y recuerdos, amenizado con música de mariachi.