Disminuyen asistentes a AA por pandemia
Este lunes Alcohólicos Anónimos (AA) inauguró su XX Semana Nacional de la Persona Alcohólica Privada de su Libertad, en las instalaciones del Centro de Integración Juvenil, en donde dieron a conocer el programa y la importancia de atender este tipo de adicciones.
Tomás Chavarría, delegado en la Zona Nayarit II, que abarca desde La Peñita hasta Tomatlán, detalló durante la presentación de este programa, que desde el inicio de la pandemia bajó el número de asistentes a los grupos, y se mostró un aumento el índice de personas con alcoholismo.
“Contamos con 84 grupos y somos un aproximado de 720 entre hombres y mujeres, es nuestra población y área. Desafortunadamente ha ido bajando nuestra asistencia, hace 12 años cuando llegué a Alcohólicos Anónimos éramos 160 mil a nivel nacional y ahora somos 107 mil personas…si hemos ido a la baja poco a poco”, señaló.
Asimismo, invitó a la población con esta enfermedad a tener un poco de voluntad y en caso de darse cuenta de que ya no pueden dejar de beber ni drogarse por sí solos, que busquen ayuda en los grupos que sesionan tres veces a la semana y aclaró que esto no implica encierros, ni anexos y no tiene costo.
Por su parte, Noe Arellano, psicólogo del Reclusorio de Puerto Vallarta, destacó que con estos foros se invita a grupos a compartir, dentro y fuera del CEINJURE, el trabajo que se realiza para la recuperación.
Informó que dentro del penal hay un grupo que se reúne de lunes a domingo, de 3:00 a 4:30 de la tarde, mismo que se ha fortalecido con la participación de internos de todos los dormitorios, incluso aquellos que están en tratamiento psiquiátrico.
Cabe destacar que las actividades concluyen el domingo con una junta pública dentro del centro penitenciario.
Indicó que el confinamiento por la pandemia del COVID, hizo que muchas familias explotaran y se elevó el índice de alcoholismo y drogadicción, junto con la violencia al interior de los hogares.
Destacó: “Empezamos a tener problemas más fuertes, quien va a poder ayudar a las personas que tienen problemas, entonces los grupos de AA y platicas colectivas estaban cerrados, comienzan a surgir otras alternativas como las videollamadas, los niños tenían sus clases con la tele, y también las terapias, se da como una apertura a esto que no le veíamos fin”.
Advirtió: “Aumentó el consumo, de por sí tenemos una población de 20 millones de personas en México con problemas de alcohol, esto se incrementó en un 33%, significa que tenemos una población enferma con el consumo y que se disparó más con la pandemia”
El maestro Arellano exhortó a que todos desde su trinchera hagan algo para contrarrestar el consumo, propuso que las escuelas tengan una clase de prevención de adicciones, materia que les permita hacer un proyecto de vida y no caer en la trampa del alcohol.
EMS