Dios, inexistente, como Sócrates lo fue al inventarlo Platón
Dios, o dioses, sobre pedido, era un gran conflicto para el gran Platón.
De las interpretaciones múltiples, y que no dejan de aparecer, está la muy sintética que presentamos, sobre la duda de muchos filósofos, los cuales sugieren que es una invención el Sócrates multireferido por Platón, y sus seguidores.
¿Mas qué necesidad tendría Platón de inventarse un maestro?
Y, a la medida de sus requerimientos iniciales, ya que posteriormente lo coloca como su alumno. La respuesta es el enfoque centrado en el juicio en el que bebe la cicuta que lo mata, antes de reconocer las divinidades celestiales que predominaban en aquella época ateniense, en Grecia.
Un tema de tribunas y tribunales para la mejor Tribuna, en la cual se fija la atención de los ávidos lectores por descubrir nuevas verdades, en temas históricos. Así, recordemos que ni siquiera Platón, afirmaba haber asistido al supuesto juicio. Su invención partía de la necesidad con dos vertientes: La primera es lograr tener un interlocutor tan pero
tan agudo, como él se apreciaba, aunque fuera imaginario.
La segunda, era precisamente fabular la injusticia extrema de llevar a un gran pensador revolucionario, hasta obligarlo al suicidio inducido.
Así, con ello, adelantar, que él mismo, no fuese enjuiciado por sus ideas libres de ataduras religiosas. Y, menos ser acusado de corromper a la juventud por tal conducta, tan mentalmente sana y liberal.
Por último, recordemos que en esos tiempos del año 399, antes de la otra fábula de Cristo, había entre la población varios Sócrates, por ser popular el nombre, como ahora es el de Juan, Jesús o Pedro. Y, que Platón, se apoyaba en mitos, ficciones y alegorías, a fin de dar veracidad a sus planteamientos. Él mismo, originalmente no se le
conocía con tal nombre; sino se llamaba realmente: ARISTOCLES.
NADA MÁS Y NADA MENOS, MIS ILUSTRADOS LECTORES.
AT